El 5 de septiembre de este año, Philadelphia enfrentó a los Seattle Marlins como visitantes, partido en el que nació la -ahora- famosa Phillies ‘Karen’, mujer que exigió que le quitó a un niño pequeño una bola que llegó hasta las gradas de los aficionados tras un cuadrangular. De este hecho que recordó Nick Castellanos.
Desde ese momento, los fanáticos de las Grandes Ligas y la sociedad en general reaccionó ante lo sucedido durante el juego de Phillies vs. Marlins. Las personas que se encontraban en las gradas junto a Phillies ‘Karen’ sintieron indignación, pues criticaron que la mujer le quitara de las manos la pelota que el pequeño había guardado en su guante con la alegría del mundo.
Durante el podcast ‘On Base’ de Mookie Betts -estrella de Los Angeles Dodgers-, en el canal de YouTube de Bleacher Report, Castellanos compartió su opinión sobre la “Karen de los Phillies”, que se hizo popular durante un partido contra los Marlins de Miami. “No puedo creerlo. Siempre que juego a la pelota o voy, le apunto a un niño”, dijo.
“Pero a veces siempre hay un adulto ambicioso que viene y lo agarra. Esta mujer obviamente estaba enojada por muchas otras cosas en su vida. Entonces ocurrió este incidente, y ahora, todo lo que la había enfadado durante años salió a la luz en ese instante, donde siente que este hombre le robó la oportunidad de ser feliz”, opinó Castellanos.
Estamos entrando en época de Halloween y el ingenio de la sociedad se hace ver al crear disfraces de la Phillies ‘Karen’. De hecho, un grupo de fanáticos se vistieron de la mujer el martes por la noche en el juego de Los Angeles Dodgers ante los Philadelphia Phillies. Las imágenes se difundieron rápidamente en redes sociales provocando las risas de la comunidad cibernauta.
Al igual que la mujer, los hombres llevaban una camiseta con una sudadera roja con capucha debajo, así como pelucas grises. En reflexión sobre el suceso: la mujer sintió que debía quedarse con la pelota por haber caído junto o cerca de ella, sin embargo, nada nunca validará una reacción de esa magnitud y, ahora, vive con las consecuencias.
