En una noche tensa en el Bronx, Los New York Yankees no lograron aprovechar una oportunidad inmejorable en la novena entrada con casa llena sin outs frente al cerrador Aroldis Chapman, quien regresaba al Yankee Stadium como verdugo con la camisola de los Boston Red Sox. Tras tres sencillos consecutivos de Goldschmidt, Judge y Bellinger, parecía que los locales armarían la remontada soñada.
Sin embargo, Chapman no se inmutó, ponchó a Giancarlo Stanton, obligó a Jazz Chisholm Jr. a batear un elevado que no trajo carreras y cerró con strikeout a Trent Grisham para silenciar el estadio y sellar la victoria de Boston por 3-1 en el Juego 1 de la Serie de Comodines.
La noche pintaba prometedora para los Yankees con un Max Fried en el montículo. El zurdo, en su debut de postemporada con Nueva York, lanzó 6.1 entrada sin permitir carreras, sorteando momentos de peligro en la cuarta, quinta y sexta entrada. Con un home run solitario de Anthony volpe en la segunda, los Yankees tenían ventaja mínima, pero suficiente para pensar en un triunfo con la fórmula tradicional: abrir con solidez y cerrar con su bullpen.
Sin embargo, todo se derrumbó con la salida de Fried. El relevo de Luke Weaver fue un desastre, enfrentó a tres bateadores, no sacó outs y permitió sencillo de Masataka Yoshida que impulsó dos carreras y dio vuelta al marcador. Así, los Red Sox pasaron de estar en desventaja a tomar el control absoluto del juego en un abrir y cerrar de ojos.
Por parte de Boston, Garrett Crochet, en su primera apertura de postemporada, lanzó 8.2 entradas de dominio total con 11 ponches, sin boletos y apenas una carrera permitida. Retiró a 18 de 19 bateadores consecutivos en un tramo de juego.
Cuando Crochet alzanzó los 117 lanzamientos, Alex Cora llamó a Aroldis Chapman, quien llegaba con la encomienda de sacar los últimos cuatro outs del juego. En total, los Red Sox solo utilizaron dos lanzadores para llevarse el Juego 1 en el Bronx, dejando a los Yankees con la presión de ganar dos juegos consecutivos si quieren seguir con vida en la postemporada.
Con esta derrota, los Yankees enfrentan un dato histórico demoledor, ningún equipo ha remontado una serie al mejor de tres en comodines tras perder el primer juego desde que se implementó este formato. Además, los Red Sox han ganado ocho de los últimos nueve juegos de playoffs ante Nueva York.
