De Ultimo Minuto
¡Se acabó la espera! Inauguran Centro Correccional y de Rehabilitación Las Parras
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<p><strong>Santo Domingo.– </strong>Quedó oficialmente inaugurado el Centro Correccional y de Rehabilitación Las Parras, en San Antonio de Guerra, un complejo que marca el comienzo del cierre gradual de la Penitenciaría Nacional de La <a href="https://deultimominuto.net/nacionales/denuncian-escandalos-en-ccr1/">Victoria </a>y la transformación del sistema penitenciario dominicano.</p>
<p>Con la apertura de este nuevo centro, inicia la primera fase de traslados. Hasta el momento, 2,400 privados de libertad han sido movilizados desde La Victoria hacia Las Parras, en grupos de 300, como parte de un proceso organizado y supervisado por las autoridades. En las nuevas instalaciones, que cuentan con espacios más amplios, estructura moderna y condiciones destinadas a mejorar la seguridad y la rehabilitación.</p>
<h3 class="wp-block-heading"><strong>Leer más: <a href="https://deultimominuto.net/uncategorized/inauguran-pabellon-de-salud-mental-en-la-penitenciaria-nacional-de-la-victoria/" data-type="post" data-id="232360">Inauguran Pabellón de Salud Mental en la Penitenciaría Nacional de La Victoria</a></strong></h3>
<p>Las Parras representa un salto cualitativo en comparación con el viejo modelo penitenciario. Su diseño está orientado a garantizar mayor control, reducir el hacinamiento, fortalecer los programas de reinserción social y asegurar la dignidad humana de la población privada de libertad.</p>
<p>La Victoria: más de siete décadas marcadas por el hacinamiento</p>
<p>Construida en 1952 por orden de Rafael Leónidas Trujillo, La Victoria fue concebida para albergar solo 1,700 internos. Con el paso de los años, su población llegó a superar los 9,000 privados de libertad, convirtiéndola en el recinto penitenciario más sobrepoblado del país.</p>
<p>Durante décadas, organismos nacionales e internacionales denunciaron las condiciones inhumanas del penal, falta de higiene, brotes de enfermedades, violencia constante, estructuras deterioradas y un alto porcentaje de internos sin condena definitiva.</p>
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