En plena cuenta atrás hacia la revolución reglamentaria de 2026, cuando las miradas de la Fórmula 1 apuntan más a los ingenieros que a los pilotos, Aston Martin Racing ha decidido abrir la puerta de su mayor apuesta: Adrian Newey, el hombre capaz de cambiar el destino de un equipo.
Y lo hará con un documental que promete convertirse en uno de los grandes eventos mediáticos del año: Turbulence: The Greatest Mind in F1 (título provisional).
Porque si hay una figura que genera ilusión —y presión— en la F1 de 2025, ese es Newey. El pez más gordo del mercado técnico abandonó Red Bull Racing tras más de una década de dominio para aterrizar en Silverstone, y desde marzo ya trabaja en el nuevo AMR Technology Campus, con túnel de viento, herramientas de última generación y un objetivo que casi suena a guion de Hollywood: darle a Fernando Alonso un coche capaz de luchar por victorias… y quizá algo más.
Una historia de ambición, riesgo y reinvención
El documental, producido por Artists Equity, Whisper y Mark Stewart Productions, seguirá a Newey desde dentro en su salto más arriesgado: cambiar el entorno donde lo ganó todo para liderar un proyecto que nunca ha levantado un título.
“Cuando Mark Stewart me propuso hacer una película, al principio no sabía si aceptarla“, reconoce Newey en el comunicado. Pero las cartas de fans que recibió tras su autobiografía —gente a la que inspiró para entender el diseño y la ingeniería de un F1— le hicieron cambiar de opinión.
“Ojalá esta película pueda mostrar la pasión, la práctica de trabajo y la fortaleza mental necesarias para llevar un coche a la parrilla”.
Turbulence mezclará su nuevo reto en Aston Martin con recuerdos luminosos y oscuros: desde el dominio reciente de Red Bull hasta los momentos más devastadores, como la muerte de Ayrton Senna. Un relato que va mucho más allá del motorsport: ambición, sacrificio, tragedia y redención.
El proyecto más importante de Aston Martin
En Silverstone creen que este documental será una ventana privilegiada al laboratorio donde se fabrica el futuro del equipo… y de la F1 moderna.
“Adrian Newey es el mayor diseñador de coches de F1 de todos los tiempos, por eso lo trajimos a la familia Aston Martin Aramco“, celebra Lawrence Stroll, que no oculta la magnitud del desafío. “Este documental ofrecerá un acceso sin precedentes a su brillante mente y al proyecto más emocionante del deporte.”
La emoción por contar esta historia llegó incluso a Hollywood. Ben Affleck, CEO de Artists Equity, lo resume así: “Esta película trata de mucho más que carreras. Es la historia de una leyenda viva cuya carrera está llena de ambición y reinvención”.
Una transición histórica que definirá 2026
El documental también mostrará la presión que recae sobre Newey en un año crítico: llegó en marzo, justo antes del mayor cambio de reglas en la historia de la F1 moderna. Lo que se diseñe ahora definirá la jerarquía del Mundial durante años. Y eso explica por qué su fichaje ha sido el movimiento más impactante desde la era híbrida.
“Es una auténtica carrera contra el tiempo, pero la F1 nunca se detiene”, reconoce Newey. “Espero que la película capture esa energía inquieta y nuestra búsqueda constante de rendimiento”.
¿Una nueva arma para Alonso?
Si Newey acierta en su primer gran proyecto verde, Fernando Alonso podría disponer en 2026 de la herramienta que lleva años esperando. Y Aston Martin, el sueño de Lawrence Stroll, podría por fin asomarse al club de los gigantes.
El documental promete mostrar cómo empezó todo: cómo Newey tomó la decisión de salir de su zona de confort en Red Bull, qué encontró al llegar a Silverstone y cómo intenta liderar el proyecto más desafiante de su carrera… precisamente cuando ésta entra en su capítulo final.
Turbulence todavía no tiene fecha de estreno, pero ya es uno de los contenidos más esperados en el paddock. Porque no se trata solo de la historia de un ingeniero. Es la historia del hombre al que muchos pilotos —incluido Alonso— le confiarían su última bala para aspirar a un Mundial.
