Para Max Verstappen y Red Bull la clasificación del GP de Singapur fue bien, quizá sorprendentemente bien, dado la historia reciente. Como el año pasado, el holandés se hizo con el segundo puesto, pero la sensación ahora es diferente. Red Bull ha hecho progresos y lo ha podido demostrar incluso en un circuito de alta carga aerodinámica.
Aunque en esencia es una buena noticia, también fue visible la frustración posterior de Verstappen relacionada con el momento en el que Lando Norris, en su opinión, se interpuso en su camino y le perjudicó al final de la Q3 al obligarle a abortar su mejor giro hasta el momento.
“Especialmente en la Q3, no puedes permitirte tener un coche tan cerca delante de ti”, dijo Verstappen. “Todo el mundo pierde ocho segundos, como mínimo. Con tanta carga aerodinámica, no quieres tener a nadie delante. No sé exactamente qué pasó ahí, pero parecía un poco innecesario entrar tan despacio al pitlane en ese momento”.
Una sanción para el culpable está descartada, aunque Verstappen deja claro que se vio afectado: “No puedes decir que te está frenando, porque por supuesto que no. No te bloquea. Pero estos coches son tan sensibles a las turbulencias y al aire sucio, que no quieres eso en la clasificación en absoluto. Es un poco una regla no escrita que no hagas algo así“.
Aunque Verstappen afirma que Norris estaba dos segundos por delante de él en el momento en cuestión, asegura que el efecto del aire sucio se sigue notando: “No queremos estar a seis o siete segundos del coche que tenemos delante. Está claro que no”, dijo Verstappen tras una pregunta de Motorsport.com.
Norris subrayó que Red Bull “siempre tiene algo de lo que quejarse” y dijo que pensaba que lo que había hecho no estaba mal, a lo que Verstappen se rió: “Bueno, yo también diría eso si fuera él…”
Preguntado por si todavía quiere vengarse de Norris, dejó escapar un pequeño silencio con una sonrisa: “No lo sé…”. Pero Verstappen en realidad ya había dado la respuesta en la radio: “Lo voy a recordar”.
Que estos días se vuelva a hablar más de este tipo de detalles dice, en esencia, mucho de la mejora de Red Bull. Indica que Verstappen ha vuelto a ser un factor en la lucha por el título. Sin embargo, en cuanto a los juegos mentales el holandés dice que no quiere participar en ellos.
“Eso no me interesa en absoluto de todos modos. Yo sólo vivo mi vida y hago mis cosas aquí en el circuito. Después, me voy a casa y hago otras cosas. Si otros se meten conmigo, es su problema”.
“Por supuesto que ese momento no era el ideal y por supuesto que preferiría estar en la pole, pero al final seguimos siendo segundos. Es un buen resultado para nosotros en este circuito, especialmente si miras cómo somos segundos ahora. Fuimos muy competitivos y eso es muy importante para mí”, finalizó.