Paul Williams, excampeón mundial y rival frustrado de Canelo Álvarez, recordó el plan de pelea que nunca se concretó y opinó sobre lo que debe hacer Terence Crawford para sorprender al tapatío este fin de semana en Las Vegas.
Hace trece años, Saúl “Canelo” Álvarez estaba listo para enfrentar a Paul Williams en la tradicional cartelera del fin de semana de la Independencia de México.
En ese entonces el boxeador estadounidense era un rival complicado por su alcance, (1.85 m de altura) su estilo agresivo y porque contaba con victorias de prestigio ante figuras como Antonio Margarito y Sergio “Maravilla” Martínez, por lo cual el combate prometía y mucho.
Sin embargo una tragedia frustró el combate, pues una semana después de firmar el contrato, Williams sufrió un accidente de motocicleta que lo dejó paralizado de la cintura para abajo.
Y en su lugar, Canelo terminó enfrentando a Josesito López, a quien derrotó con autoridad en el MGM Grand de Las Vegas.
Desde entonces Williams, ha seguido de cerca la carrera de Álvarez convencido de que su estrategia en 2012 pudo haber sorprendido a un Canelo Álvarez inexperto en aquel entonces.
Williams reveló que su idea era desgastar al mexicano con volumen de golpes y luego presionarlo en los últimos asaltos:
“Yo sabía que tenía poder. Iba a retroceder toda la noche y dejar que me siguiera. Para el séptimo round, iba a empezar a caminar hacia él y ponerle presión. Ese era mi plan: ponerle ese golpe fuerte.” confesó Paul Williams.
Con su estilo de lanzar más de cien golpes por round y una ventaja de estatura y alcance, Williams creía tener las armas para complicar a un Canelo de apenas 22 años, todavía en proceso de aprendizaje antes de ser dominado por Floyd Mayweather en 2013.
Mucho ha crecido el boxeador mexicano desde entonces, y diferentes son las condiciones de Terence Crawford, sin embargo es interesante conocer cuál será la estrategia de Bud. Para Williams, la clave está en que Crawford no se quede corto en agresividad:
“La única forma en que Crawford va a ganarle es convirtiéndose en un perro. Tiene que ir a por Canelo, meterle un buen golpe en la boca. Eso cambia toda la noche.”
Canelo llega con la experiencia de grandes batallas en el ring, la gran mayoría de ellas bien libradas, aunque con la presión de demostrar que todavía tiene gasolina en el tanque. Crawford, en cambio, quiere dar el golpe de autoridad más grande de su carrera, a cuestión de horas de que se lleve a cabo este esperado combate surgen varias preguntas y parece que tenemos una sola garantía: este será un combate inolvidable.
