Ciencia y Tecnología
Olas de calor y contaminación: cómo el calor extremo deteriora la calidad del aire
<p>Las olas de calor, cada vez más frecuentes, intensas y prolongadas en todo el mundo, representan un serio riesgo para la salud humana, y no solo por las altas temperaturas.</p>
<p>​Las olas de calor, cada vez más frecuentes, intensas y prolongadas en todo el mundo, representan un serio riesgo para la salud humana, y no solo por las altas temperaturas. </p>
<p>El <a class="internal-link" href="https://www.dw.com/es/cambio-clim%C3%A1tico/t-17411706">cambio climático</a> y la contaminación atmosférica son dos crisis medioambientales estrechamente vinculadas, ya que ambas están ligadas a variaciones en la composición de la atmósfera. Desde la era preindustrial, el aumento de los gases de efecto invernadero y de los aerosoles alteró el <a class="internal-link" href="https://www.dw.com/es/el-planeta-arde-es-este-calor-la-nueva-normalidad/a-73112725">equilibrio terrestre</a>, modificado los ciclos geoquímicos y deteriorado tanto la calidad del aire como la salud de las personas.</p>
<p>Con el fin de comprender cómo el calor extremo afecta a la química atmosférica y a la calidad del aire, un equipo del Centro de Química Atmosférica y Medio Ambiente (CACE) de la Universidad Texas A&;M (Estados Unidos) <a rel="noopener follow" target="_blank" class="external-link" href="https://acs.digitellinc.com/p/s/measuring-gas-phase-air-pollutants-during-heatwave-conditions-632203" title="Enlace externo — realizó un estudio">realizó un estudio</a>durante la <a class="internal-link" href="https://www.dw.com/es/una-ola-de-calor-precoz-envuelve-estados-unidos/a-69406546">ola de calor</a> que azotó Texas en agosto de 2024.</p>
<h2>El estudio piloto en Texas</h2>
<p>El experimento se llevó a cabo en el campus de College Station entre el 5 de agosto y el 3 de septiembre, con temperaturas que oscilaron entre los 32 y 41 °C. Los investigadores recogieron muestras de aire tanto de día como de noche. La ausencia de incendios forestales en las cercanías permitió aislar los efectos de la ola de calor sin la interferencia del humo en la calidad del aire.</p>
<p>Se analizaron las muestras de aire en busca de contaminantes que afectan la salud pública, como óxidos de nitrógeno, ozono, compuestos orgánicos volátiles (COV) y nanopartículas.</p>
<h2>Los resultados de las muestras de aire</h2>
<p>Los resultados revelaron niveles preocupantes de ozono, COV oxigenados y nanopartículas con alto contenido de ácido, cuya concentración aumenta con la temperatura. También se observó un incremento en los niveles de contaminantes atmosféricos generado por reacciones químicas en el aire provocadas por la luz solar.</p>
<figure class="placeholder-image master_landscape big"><img data-format="MASTER_LANDSCAPE" data-id="66246261" data-url="https://static.dw.com/image/66246261_$formatId.jpeg" data-aspect-ratio="16/9" alt="Un hombre sentado en un banco durante la ola de calor en Houston, Texas." src="image/gif;base64,R0lGODlhAQABAAAAACH5BAEKAAEALAAAAAABAAEAAAICTAEAOw==" /><figcaption class="img-caption">Durante las olas de calor, los árboles emiten mayores cantidades de COV naturales<small class="copyright">Imagen: Adrees Latif/REUTERS</small></figcaption></figure>
<p>Otro hallazgo clave fue que, durante las olas de calor, los árboles emiten mayores cantidades de COV naturales como el isopreno, un precursor del ozono que podría ser perjudicial en entornos con abundante vegetación.</p>
<p>&#8220;Fue sorprendente comprobar cómo estas emisiones de los árboles aumentan durante las olas de calor e interactúan con la contaminación atmosférica”, explicó Bianca Pamela Aridjis-Olivos, autora principal de la investigación y especialista en química atmosférica de la Universidad de Texas.</p>
<p>Por sí solas, estas emisiones de los árboles no son dañinas, pero &#8220;cuando reaccionan con otras emisiones bajo una fuerte radiación solar, se produce un incremento del ozono y de los aerosoles orgánicos secundarios, que representan un riesgo para la salud pública”, detalló.</p>
<h2>Protegerse del calor</h2>
<p>Para reducir la exposición durante las olas de calor, los expertos recomiendan: evitar salir entre las 12 y las 16 horas, cuando las temperaturas y los niveles de ozono son más altos, limitar la actividad física al aire libre, informarse sobre la calidad del aire local, y mantener las ventanas cerradas para disminuir la entrada de contaminantes.</p>
<p>Los investigadores concluyen que la mejor forma de proteger la salud pública a largo plazo es profundizar en el estudio de cómo el cambio climático altera la química atmosférica y la calidad del aire.</p>
<p>bt (EFE, American Chemical Society (ACS), phys.org)</p>
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<p>​Deutsche Welle: DW.COM &#8211; Ciencia y Tecnologia</p>