Ciencia y Tecnología
Según un nuevo estudio, la Sábana Santa jamás cubrió a Jesucristo. Lo raro es que ha puesto a defensores y críticos de acuerdo

El Sudario de Turín, también conocido como ‘Sábana Santa’, es una de las reliquias más importantes de la cristiandad. Esta tela de lino de 4,4 x 1,1 metros ha sido un histórico foco de polémica entre quienes defienden que fue la manta que se colocó sobre el cuerpo de Jesucristo en el momento de su entierro y los que opinan que se trata de una tela siglos posterior. Ahora se ha publicado un nuevo estudio para añadir más leña al fuego al afirmar que la Sábana Santa es falsa.
Y lo que ha conseguido es unir tanto a defensores como críticos de la autenticidad de la tela.
En corto. Cicero Moraes es un investigador brasileño especializado en reconstrucción tridimensional. Ya avisaba en 2024, pero en el reciente estudio publicado en la revista Archaeometry ha presentado las conclusiones que le llevan a considerar la Sábana Santa como una falsa reliquia. Utilizando software open source y modelos tridimensionales, Moraes abordó la formación de la imagen de la sábana realizando simulaciones digitales.
Analizó cómo se comporta una tela al cubrir distintas formas tridimensionales, observando los patrones de la sábana y concluyendo que se adaptan mucho mejor a un modelo sólido y sin demasiada profundidad, como un bajorrelieve, que a algo más “blando” y con profundidad, como la anatomía humana. Esto, para él, ya descartaría que fuera la sábana que cubrió el cuerpo de Jesucristo, argumentando que, en ese caso, la distorsión de la imagen y los pliegues serían mucho más evidentes si hubiese cubierto un cuerpo humano.
Aquí se puede ver el vídeo de la simulación de Moraes:
¿Entonces? El investigador sostiene, basado en esos modelos 3D como los que se utilizan en el cine y los videojuegos para simular físicas de objetos, que la imagen del sudario sólo podría haber sido creada si se hubiera colocado sobre un bajorrelieve de una figura humana, como puede ser una talla de piedra o madera.
Si hubiese cubierto un cuerpo humano, la imagen del sudario no sería tan perfecta y debería estar más distorsionada debido a la mayor profundidad del cuerpo, sobre todo en los laterales. Vamos, que la sábana real muestra una “fotocopia” de una escultura o un bajorrelieve, no de un cuerpo humano. De haber cubierto un cuerpo, habría presentado el documentado efecto “Máscara de Agamenón“.
El estudio de Moraes muestra cómo sería realmente la silueta de Jesucristo si la sábana hubiese estado sobre un cuerpo, a la izquierda, frente a la representación perfecta del cuerpo que muestra el sudario, a la derecha
Estudios anteriores. El de Moraes es sólo uno de los muchos análisis que se han hecho para comprobar la autenticidad de la reliquia. El más famoso, quizá, es la prueba realizada en 1988 por laboratorios de Oxford, Arizona y Zurich en la que se utilizó el carbono-14 y determinó que el tejido se había producido en algún momento entre el 1260 y el 1390 d.C.
Aparte de los estudios, para desmontar la historia de la Sábana Santa se argumenta que no hay registros antes del 1350 d.C., cuando Godofredo de Charny la expuso por primera vez en una localidad francesa. Y tampoco hay escritos de la tradición cristiana que mencionen la sábana. Claro, por otra parte, los defensores de su autenticidad argumentan que la prueba más sólida, la de 1988, podría haber sido contaminada con materiales posteriores a la época de Cristo, y que la sábana tendría unos 2.000 años de antigüedad.
Otro estudio reciente apuntó que las manchas del sudario se correspondían con la sangre que se podría producir con la tortura y crucifixión, pero también los hay que indican lo contrario.
El sudario
Críticas. El problema del nuevo estudio es el que puedes estar imaginando: es una declaración extremadamente potente basada en un análisis teórico con datos estrictamente digitales como los de una simulación 3D. Y las críticas no han tardado en llegar.
El Centro Internacional de Sindonología de Turín (quienes se encargan del estudio de la Sábana), directamente, apunta que el trabajo de Moraes no aporta pruebas directas sobre la pieza histórica y, aunque el modelado 3D es valioso desde la perspectiva de la visualización del tejido sobre el cuerpo, no tiene en cuenta variables como la elasticidad de la tela, entre otros factores. Y que es una representación visual de una teoría con un siglo a sus espaldas sin añadir mucho más.
Otros expertos han comentado que, si bien el estudio es interesante, las simulaciones, por sí solas, no pueden sustituir el análisis directo del objeto.
Contexto convulso. Las primeras declaraciones de Moraes en 2024 sobre su estudio llegaron en un momento complicado, ya que la Sábana Santa iba a ser una pieza importante en los actos del Jubileo 2025. No mostrando el elemento real, sino una serie de representaciones digitales muy precisas.
¿Y qué dice el Vaticano? Curiosamente, no se han pronunciado. Pero no con este estudio 3D, sino históricamente. La postura oficial es la de fomentar el estudio interdisciplinar de la pieza, sin emitir un juicio concluyente. Y esto es algo que se valora en la comunidad científica, ya que mantiene el debate vivo y abierto, permitiendo nuevas aproximaciones de estudio en futuras investigaciones.
Por tanto… ¿la Sábana Santa es falsa? Moraes defiende que su origen es el de una obra de arte medieval, pero su investigación mediante simulaciones no puede ser definitiva.
Por tanto, sigue el debate sobre si se trata de la reliquia sagrada original o si es una creación medieval y, como Matteo Borrini, uno de los investigadores que sostiene que es un artefacto medieval, comentó hace unos años, “nuestra fe no se basa en el sudario, sino en los evangelios”, por lo que daría igual si el sudario es original o algo muy posterior, ya que por encima de él se encuentra la fe.
–
La noticia
Según un nuevo estudio, la Sábana Santa jamás cubrió a Jesucristo. Lo raro es que ha puesto a defensores y críticos de acuerdo
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Alejandro Alcolea
.
El Sudario de Turín, también conocido como ‘Sábana Santa’, es una de las reliquias más importantes de la cristiandad. Esta tela de lino de 4,4 x 1,1 metros ha sido un histórico foco de polémica entre quienes defienden que fue la manta que se colocó sobre el cuerpo de Jesucristo en el momento de su entierro y los que opinan que se trata de una tela siglos posterior. Ahora se ha publicado un nuevo estudio para añadir más leña al fuego al afirmar que la Sábana Santa es falsa.
Y lo que ha conseguido es unir tanto a defensores como críticos de la autenticidad de la tela.
En corto. Cicero Moraes es un investigador brasileño especializado en reconstrucción tridimensional. Ya avisaba en 2024, pero en el reciente estudio publicado en la revista Archaeometry ha presentado las conclusiones que le llevan a considerar la Sábana Santa como una falsa reliquia. Utilizando software open source y modelos tridimensionales, Moraes abordó la formación de la imagen de la sábana realizando simulaciones digitales.
Analizó cómo se comporta una tela al cubrir distintas formas tridimensionales, observando los patrones de la sábana y concluyendo que se adaptan mucho mejor a un modelo sólido y sin demasiada profundidad, como un bajorrelieve, que a algo más “blando” y con profundidad, como la anatomía humana. Esto, para él, ya descartaría que fuera la sábana que cubrió el cuerpo de Jesucristo, argumentando que, en ese caso, la distorsión de la imagen y los pliegues serían mucho más evidentes si hubiese cubierto un cuerpo humano.
Aquí se puede ver el vídeo de la simulación de Moraes:
¿Entonces? El investigador sostiene, basado en esos modelos 3D como los que se utilizan en el cine y los videojuegos para simular físicas de objetos, que la imagen del sudario sólo podría haber sido creada si se hubiera colocado sobre un bajorrelieve de una figura humana, como puede ser una talla de piedra o madera.
Si hubiese cubierto un cuerpo humano, la imagen del sudario no sería tan perfecta y debería estar más distorsionada debido a la mayor profundidad del cuerpo, sobre todo en los laterales. Vamos, que la sábana real muestra una “fotocopia” de una escultura o un bajorrelieve, no de un cuerpo humano. De haber cubierto un cuerpo, habría presentado el documentado efecto “Máscara de Agamenón”.
El estudio de Moraes muestra cómo sería realmente la silueta de Jesucristo si la sábana hubiese estado sobre un cuerpo, a la izquierda, frente a la representación perfecta del cuerpo que muestra el sudario, a la derecha
Estudios anteriores. El de Moraes es sólo uno de los muchos análisis que se han hecho para comprobar la autenticidad de la reliquia. El más famoso, quizá, es la prueba realizada en 1988 por laboratorios de Oxford, Arizona y Zurich en la que se utilizó el carbono-14 y determinó que el tejido se había producido en algún momento entre el 1260 y el 1390 d.C.
Aparte de los estudios, para desmontar la historia de la Sábana Santa se argumenta que no hay registros antes del 1350 d.C., cuando Godofredo de Charny la expuso por primera vez en una localidad francesa. Y tampoco hay escritos de la tradición cristiana que mencionen la sábana. Claro, por otra parte, los defensores de su autenticidad argumentan que la prueba más sólida, la de 1988, podría haber sido contaminada con materiales posteriores a la época de Cristo, y que la sábana tendría unos 2.000 años de antigüedad.
Otro estudio reciente apuntó que las manchas del sudario se correspondían con la sangre que se podría producir con la tortura y crucifixión, pero también los hay que indican lo contrario.
El sudario
Críticas. El problema del nuevo estudio es el que puedes estar imaginando: es una declaración extremadamente potente basada en un análisis teórico con datos estrictamente digitales como los de una simulación 3D. Y las críticas no han tardado en llegar.
El Centro Internacional de Sindonología de Turín (quienes se encargan del estudio de la Sábana), directamente, apunta que el trabajo de Moraes no aporta pruebas directas sobre la pieza histórica y, aunque el modelado 3D es valioso desde la perspectiva de la visualización del tejido sobre el cuerpo, no tiene en cuenta variables como la elasticidad de la tela, entre otros factores. Y que es una representación visual de una teoría con un siglo a sus espaldas sin añadir mucho más.
Otros expertos han comentado que, si bien el estudio es interesante, las simulaciones, por sí solas, no pueden sustituir el análisis directo del objeto.
En Xataka
En plena crisis de fe entre los jóvenes, la Iglesia ha encontrado literalmente a un santo: el primer santo millennial
Contexto convulso. Las primeras declaraciones de Moraes en 2024 sobre su estudio llegaron en un momento complicado, ya que la Sábana Santa iba a ser una pieza importante en los actos del Jubileo 2025. No mostrando el elemento real, sino una serie de representaciones digitales muy precisas.
¿Y qué dice el Vaticano? Curiosamente, no se han pronunciado. Pero no con este estudio 3D, sino históricamente. La postura oficial es la de fomentar el estudio interdisciplinar de la pieza, sin emitir un juicio concluyente. Y esto es algo que se valora en la comunidad científica, ya que mantiene el debate vivo y abierto, permitiendo nuevas aproximaciones de estudio en futuras investigaciones.
Por tanto… ¿la Sábana Santa es falsa? Moraes defiende que su origen es el de una obra de arte medieval, pero su investigación mediante simulaciones no puede ser definitiva.
Por tanto, sigue el debate sobre si se trata de la reliquia sagrada original o si es una creación medieval y, como Matteo Borrini, uno de los investigadores que sostiene que es un artefacto medieval, comentó hace unos años, “nuestra fe no se basa en el sudario, sino en los evangelios”, por lo que daría igual si el sudario es original o algo muy posterior, ya que por encima de él se encuentra la fe.
En Xataka | Boadilla del Monte no es famosa por muchas cosas. Así que ahora quiere levantar una estatua de Jesucristo de 37 metros
– La noticia
Según un nuevo estudio, la Sábana Santa jamás cubrió a Jesucristo. Lo raro es que ha puesto a defensores y críticos de acuerdo
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Alejandro Alcolea
.