Ciencia y Tecnología
En su empeño por retener a Elon Musk, Tesla ha encontrado una fórmula para motivarle a seguir como CEO: 29.000 millones de dólares
Tesla ha aprobado un nuevo paquete de acciones para Elon Musk valorado en aproximadamente 29.000 millones de dólares según el valor de mercado. El nuevo plan de remuneración al CEO de Tesla tiene, como único objetivo de atarlo al sillón de director ejecutivo, al menos en los próximos dos años.
La medida llega en un momento en el que las acciones de la compañía parecen haberse estabilizado tras los sucesivos terremotos políticos provocados por Musk, que han sacudido la confianza de los inversores.
Esta calma tensa ha llevado a que Tesla busque asegurar la permanencia de Elon Musk al frente, con un nuevo acuerdo temporal que, como destacaban en Financial Times, se aleja de los convencionales bonos por objetivos de los CEO de las grandes compañías y parece ser más un incentivo para que Musk cambie su actitud y se centre en su trabajo en Tesla.
29.000 millones a cambio de portarse bien
El nuevo paquete de incentivos, valorado en unos 29.000 es, en realidad, una solución temporal. El anterior bono de remuneración de Musk aprobado en 2018 por más de 56.000 millones de dólares fue bloqueado hasta en dos ocasiones por un tribunal de Delaware ante la denuncia de un accionista de Tesla que lo consideró excesivo. El tribunal le dio la razón.
Es decir, Elon Musk llevaría desde 2018 trabajando a cambio de un salario simbólico al que obliga la ley (unos 56.000 dólares al año, según las cuentas presentadas por Tesla) al que el CEO renunció, ya que no pudo cobrar el bono de incentivos que sí cumplió. Con este nuevo paquete de remuneración, Tesla busca una forma de compensar a Musk por el trabajo de los últimos siete años, mientras se desbloquea su anterior compensación. Si finalmente se desbloquea su bono de 2018, este paquete se anulará y solo recibirá los 56.000 millones de dólares que ya había conseguido.
El paquete aprobado por Tesla otorga a Musk 96 millones de acciones restringidas que podrán ser ejercidas con un precio fijo de 23,34 dólares por acción, muy por debajo de los precios actuales de mercado que rondan los 300 dólares por acción. Para que Musk pueda recibir estas acciones deberá seguir desempeñando un papel directivo (no necesariamente CEO, basta con directivo) en Tesla hasta al menos 2027 y mantener las acciones bloqueadas cinco años después para sólo vender lo necesario para impuestos.
El fabricante de coches eléctricos ha definido la oferta como un “primer paso crucial” de cara a una “estrategia de compensación a largo plazo para el CEO”. Su plan es diseñar un plan de remuneración más detallado y con una visión más a largo plazo para Musk antes de la junta de accionistas de la compañía en noviembre, para someterlo a votación.
Llama la atención que, a diferencia de lo que suele ser habitual en los incentivos a directivos, esta remuneración no esté vinculada a la exigencia de una mayor dedicación de Musk para solucionar los problemas de Tesla o al logro de determinados retos que la compañía tiene por delante, como remontar la caída de ventas en buena parte de los mercados mundiales, la implantación del robotaxi autónomo o el desarrollo de los robots Optimus.
Tesla parece conformarse con que Elon Musk ocupe el sillón de CEO durante los próximos dos años, una exigencia bastante laxa teniendo en cuenta que hace unos meses los inversores reclamaron a Musk que dedicara al menos 40 horas semanales a Tesla, considerando que divide su tiempo en otras empresas como SpaceX, Neuralink y xAI.
Motivación y futuro de Musk en Tesla
Hace algunos meses, ante el bloqueo judicial de su bono de 2018, el propio Musk ya manifestó que puede “perder la motivación” si no se le compensa adecuadamente y dedicar todavía menos tiempo a Tesla. Por eso, este paquete millonario es clave para tenerlo enfocado en la compañía y evitar que se disperse en sus otros proyectos.
Tal y como recordaba The Wall Street Journal, Elon Musk afirmó que quería tener suficiente control de voto para no ser “desbancado por inversores activistas”.
“No es una cuestión de dinero. Es un control razonable sobre el futuro de la empresa. Sobre todo, si estamos construyendo millones, potencialmente miles de millones, de robots humanoides. No puedo quedarme sentado preguntándome si los activistas me van a echar por motivos políticos. Sería inaceptable. Eso es lo único que importa”, aseguró en una entrevista durante el Foro Económico de Catar en mayo.
La principal baza en la manga de Tesla es que Musk, además de su CEO es también uno de sus principales accionistas, controlando aproximadamente el 20% de sus acciones. Eso supone unos 194.000 millones de dólares de su fortuna personal. Lo cual ya es en sí mismo un buen incentivo.
Imagen | Tesla, Dvids (Trevor Cokley)
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La noticia
En su empeño por retener a Elon Musk, Tesla ha encontrado una fórmula para motivarle a seguir como CEO: 29.000 millones de dólares
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Rubén Andrés
.
Tesla ha aprobado un nuevo paquete de acciones para Elon Musk valorado en aproximadamente 29.000 millones de dólares según el valor de mercado. El nuevo plan de remuneración al CEO de Tesla tiene, como único objetivo de atarlo al sillón de director ejecutivo, al menos en los próximos dos años.
La medida llega en un momento en el que las acciones de la compañía parecen haberse estabilizado tras los sucesivos terremotos políticos provocados por Musk, que han sacudido la confianza de los inversores.
Esta calma tensa ha llevado a que Tesla busque asegurar la permanencia de Elon Musk al frente, con un nuevo acuerdo temporal que, como destacaban en Financial Times, se aleja de los convencionales bonos por objetivos de los CEO de las grandes compañías y parece ser más un incentivo para que Musk cambie su actitud y se centre en su trabajo en Tesla.
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Es decir, Elon Musk llevaría desde 2018 trabajando a cambio de un salario simbólico al que obliga la ley (unos 56.000 dólares al año, según las cuentas presentadas por Tesla) al que el CEO renunció, ya que no pudo cobrar el bono de incentivos que sí cumplió. Con este nuevo paquete de remuneración, Tesla busca una forma de compensar a Musk por el trabajo de los últimos siete años, mientras se desbloquea su anterior compensación. Si finalmente se desbloquea su bono de 2018, este paquete se anulará y solo recibirá los 56.000 millones de dólares que ya había conseguido.
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Llama la atención que, a diferencia de lo que suele ser habitual en los incentivos a directivos, esta remuneración no esté vinculada a la exigencia de una mayor dedicación de Musk para solucionar los problemas de Tesla o al logro de determinados retos que la compañía tiene por delante, como remontar la caída de ventas en buena parte de los mercados mundiales, la implantación del robotaxi autónomo o el desarrollo de los robots Optimus.
Tesla parece conformarse con que Elon Musk ocupe el sillón de CEO durante los próximos dos años, una exigencia bastante laxa teniendo en cuenta que hace unos meses los inversores reclamaron a Musk que dedicara al menos 40 horas semanales a Tesla, considerando que divide su tiempo en otras empresas como SpaceX, Neuralink y xAI.
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Hace algunos meses, ante el bloqueo judicial de su bono de 2018, el propio Musk ya manifestó que puede “perder la motivación” si no se le compensa adecuadamente y dedicar todavía menos tiempo a Tesla. Por eso, este paquete millonario es clave para tenerlo enfocado en la compañía y evitar que se disperse en sus otros proyectos.
Tal y como recordaba The Wall Street Journal, Elon Musk afirmó que quería tener suficiente control de voto para no ser “desbancado por inversores activistas”.
“No es una cuestión de dinero. Es un control razonable sobre el futuro de la empresa. Sobre todo, si estamos construyendo millones, potencialmente miles de millones, de robots humanoides. No puedo quedarme sentado preguntándome si los activistas me van a echar por motivos políticos. Sería inaceptable. Eso es lo único que importa”, aseguró en una entrevista durante el Foro Económico de Catar en mayo.
La principal baza en la manga de Tesla es que Musk, además de su CEO es también uno de sus principales accionistas, controlando aproximadamente el 20% de sus acciones. Eso supone unos 194.000 millones de dólares de su fortuna personal. Lo cual ya es en sí mismo un buen incentivo.
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Imagen | Tesla, Dvids (Trevor Cokley)
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