Lo que muchos veían como la solución a todos los males que asolan a los New York Yankees, el regreso de Aaron Judge, estuvo lejos de ser el remedio necesario para evitar que se alejen aún más de los Toronto Blue Jays, que desde hace tiempo lideran la División Este de la Liga Americana.
El vigente MVP de la Liga Americana regresó como bateador designado y se fue de vacío en sus tres turnos de su reaparición, con dos ‘strikeouts’.
Los Yankees consiguieron mantener a los Rangers de Texas sin anotar hasta la octava entrada, cuando su pitcheo volvió a flaquear. Devin Williams permitió dos carreras después de que Rowdy Tellez tuviera un turno al bate excelente, impulsando a Adolis García y Joc Pederson.
El resto fue historia. El equipo dirigido por Aaron Boone no tuvo respuesta, prolongando su crisis, que ya es agónica. La búsqueda de culpables continúa, con el mánager como uno de los principales señalados, mientras la afición espera que el equipo que jugó la Serie Mundial el año pasado recupere su mejor versión.
Los Yankees han caído en una racha de cinco derrotas consecutivas, sin ganar desde el 31 de julio, cuando vencieron 7-4 a los Rays de Tampa Bay.
Durante su serie contra los Philadelphia Phillies, la estrella de New York cayó en la lista de lesionados el 26 de julio. Se esperaba que su regreso al lineup cambiara las cosas para el equipo de Aaron Boone, pero no ha sido así.
Sin Aaron Judge, los Yankees tuvieron marca de 4-6, incluyendo ser barridos por los Marlins de Miami el fin de semana pasado, mientras registraban una ofensiva anémica con una línea de bateo de .231/.311/.399.
Los Yankees se medirán de nuevo a los Rangers con el objetivo de evitar una segunda barrida consecutiva, sabiendo que ahora están a seis juegos del líder de división y su puesto en la postemporada peligra.