Leclerc: “Mi objetivo no es batir a Hamilton, sino devolver a Ferrari a la cima”

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Charles Leclerc aterriza en Spa-Francorchamps para afrontar el Gran Premio de Bélgica 2025 con un discurso sincero, consciente de las limitaciones del Ferrari actual, pero también con una dosis de esperanza ante el último gran paquete de mejoras de la temporada. Con doce carreras disputadas y una lucha constante por posiciones alejadas del podio, el monegasco reconoce que este año no está siendo el que soñaba… aunque mantiene la determinación intacta.

“El objetivo ahora no es batir a Lewis. Cuando luchas por la cuarta, quinta o sexta posición, eso no es lo que me motiva. Estoy centrado en hacer el mejor trabajo posible para ayudar a que Ferrari vuelva a lo más alto”, afirmó Leclerc este jueves en el Media Day del GP de Bélgica.

La temporada 2025 está siendo compleja para Ferrari. Después de un prometedor final de 2024, en Maranello decidieron reinventar el coche, pero el resultado ha sido un monoplaza de difícil conducción y con un techo de rendimiento claramente inferior al de McLaren F1 —el equipo dominador del año— e incluso a Mercedes en muchas citas. A pesar de ello, Leclerc ha brillado más que su nuevo compañero, Lewis Hamilton, quien aún lucha por adaptarse al coche.

“Estoy aquí para aprender de Lewis todo lo que pueda y mejorar como piloto. Pero no me fijo demasiado en si voy por delante o por detrás de él. Eso cambiará el día en que estemos luchando por victorias”, reflexiona Charles.

Una mejora importante… en un fin de semana complicado

Ferrari ha traído a Spa el que probablemente será su último gran paquete de mejoras de 2025. Incluye una suspensión trasera modificada que, según Leclerc, estaba prevista desde hace tiempo. Pero su evaluación será complicada: el formato Sprint del GP de Bélgica limita a una única sesión de entrenamientos libres antes de entrar de lleno en la clasificación del viernes.

“Es una ‘sprint weekend’, así que solo tenemos un libre. Pero no debería ser un gran problema. Esta evolución llevaba tiempo planificada, y espero que nos dé un paso adelante”, explicó el monegasco.

“No anticipo grandes dificultades para adaptarme. Aunque hay cosas que no comentaré públicamente; necesitamos ver cómo se comporta en pista”.

El objetivo principal no es ganar en Spa, sino comprender hasta qué punto estas novedades pueden allanar el camino para lo que queda de temporada. Leclerc no espera milagros, pero sí una pequeña inyección de rendimiento que les acerque a Mercedes… y les mantenga por delante de Red Bull, al menos en algunos escenarios.

El eterno problema en lluvia… y el papel de Hamilton

Foto de: Sam Bloxham / Motorsport Images via Getty Images

En un circuito como Spa, donde las nubes no piden permiso, la meteorología será una gran incógnita. Y Ferrari no es precisamente un coche cómodo sobre mojado. De hecho, Leclerc viene de un GP de Silverstone donde sufrió más que nunca en condiciones de lluvia, con errores que él mismo calificó como “importantes”.

“La lluvia siempre fue uno de mis puntos fuertes en categorías inferiores. Pero desde que estoy en Ferrari, he perdido gran parte de eso. El coche no se comporta bien en mojado, y estamos intentando entender por qué. No creo que sea una única cosa, sino un cúmulo de factores que nos complican mucho la vida cuando hay poca adherencia”.

En ese contexto, la experiencia de Hamilton está resultando valiosa. El británico reveló que ha preparado documentos internos para proponer mejoras en la estructura del equipo. Leclerc, lejos de sentirse desplazado, aplaude la iniciativa.

“Lewis viene de una cultura muy distinta, de muchos años en Mercedes, y su punto de vista es interesante. Pero no es que ahora empiecen a hacerse estas cosas. Ya desde el primer día compartimos nuestras ideas en reuniones conjuntas. Yo presento mis puntos, él los suyos, y todos vamos en la misma dirección. No hay ningún tipo de tensión”.

Un año difícil, pero con ambición intacta

Leclerc ocupa actualmente la quinta posición del Mundial. Está claramente por delante de Hamilton en resultados, pero también lejos de los focos de la victoria. No es la temporada que esperaba, pero no baja los brazos.

“Hay mucho trabajo detrás. No es nuestra mejor temporada, eso está claro. Pero creo que este equipo tiene las herramientas y la gente para volver a luchar arriba. Y ese es mi objetivo. Todo lo demás, ahora mismo, es secundario”.

Este fin de semana, en Spa, puede no ser un punto de inflexión, pero sí una oportunidad para comprobar si Ferrari aún tiene algo que decir en la segunda mitad del curso. Y si Leclerc puede seguir liderando, aunque sea en la sombra, el regreso de la Scuderia a la cima.