Ciencia y Tecnología
AEMET nos trae por fin una buena noticia: el alivio térmico ya está aquí pero con una advertencia de la mano
El calor, protagonista indiscutible de la primera mitad del verano, parece que va a darnos una tregua. Esta vez no es una tregua de dos o tres días en la que las tormentas rebajan la temperatura durante un par de días antes del regreso de temperaturas aún más extremas que las anteriores.
Más frescos. Los modelos meteorológicos prevén una semana más cercana a la normalidad en lo que a las temperaturas se refiere. Es más: durante los próximos días podremos ver anomalías térmicas negativas en buena parte de la Península Ibérica, es decir, temperaturas más frescas de lo que correspondería a estas fechas.
Mirando al chorro polar. ¿Cómo hemos llegado de un calor de récord a esta “normalidad”? La respuesta a esta pregunta parece estar, principalmente, en el chorro polar. Más concretamente, en las ondulaciones que esta corriente dibuja en su transcurso.
El chorro polar supone una barrera que separa masas de aire frío del polo del aire más cálido de las latitudes subrtopicales. Al serpentear puede hacer que las masas de aire polar alcancen latitudes más bajas, trayendo inestabilidad a estas áreas, que es lo que se prevé ocurra esta semana.
Seguimos en verano. Eso sí desde la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) recuerdan que seguimos en verano, y cerca de la canícula, por lo que las temperaturas frescas no implican que el calor se vaya a ir del todo. Las previsiones de AEMET hablan de temperaturas que podrían seguir superando los 34º en zonas del sur durante buena parte de la semana.
De hecho la mantiene varios avisos por temperaturas máximas elevadas para los próximos días, en algunas áreas de Andalucía, Murcia y Alicante. Estos avisos convivirán el miércoles con avisos por tormentas y lluvia en algunas áreas del Pirineo. El alivio térmico no va a implicar una situación un tanto revuelta.
Una nueva vaguada. Y es que el alivio térmico no va a implicar una situación menos revuelta. Una vaguada impulsada por el chorro polar traerá tormentas que podrán ser intensas en zonas del norte y del oeste. Se prevé que lo peor de este episodio comience a notarse el miércoles al norte de la vertiente mediterránea, extendiéndose durante los siguientes días al levante y Baleares.
Según describe el geógrafo Samuel Biener en Meteored, “no se trata de un episodio de lluvias generalizadas, sino de núcleos tormentosos de carácter muy irregular y capaces de generar fenómenos adversos, algo que es habitual en esta época”. El viernes la vaguada irá perdiendo su influencia sobre nuestro territorio.
¿Vuelta al calor? Hacia el fin de semana la situación podría volver a cambiar, lo que parce indicar el regreso del calor para la semana semana que viene. Aunque aún existe incertidumbre, algunos modelos señalan el regreso del calor en altitud, lo que adelantaría la llegada de nuevos episodios cálidos como los que vimos el mes de junio. Puede que más si tenemos en cuenta su proximidad a los días de canícula.
Imagen | ECMWF
–
La noticia
AEMET nos trae por fin una buena noticia: el alivio térmico ya está aquí pero con una advertencia de la mano
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Pablo Martínez-Juarez
.
El calor, protagonista indiscutible de la primera mitad del verano, parece que va a darnos una tregua. Esta vez no es una tregua de dos o tres días en la que las tormentas rebajan la temperatura durante un par de días antes del regreso de temperaturas aún más extremas que las anteriores.
Más frescos. Los modelos meteorológicos prevén una semana más cercana a la normalidad en lo que a las temperaturas se refiere. Es más: durante los próximos días podremos ver anomalías térmicas negativas en buena parte de la Península Ibérica, es decir, temperaturas más frescas de lo que correspondería a estas fechas.
Mirando al chorro polar. ¿Cómo hemos llegado de un calor de récord a esta “normalidad”? La respuesta a esta pregunta parece estar, principalmente, en el chorro polar. Más concretamente, en las ondulaciones que esta corriente dibuja en su transcurso.
El chorro polar supone una barrera que separa masas de aire frío del polo del aire más cálido de las latitudes subrtopicales. Al serpentear puede hacer que las masas de aire polar alcancen latitudes más bajas, trayendo inestabilidad a estas áreas, que es lo que se prevé ocurra esta semana.
En Xataka
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De hecho la mantiene varios avisos por temperaturas máximas elevadas para los próximos días, en algunas áreas de Andalucía, Murcia y Alicante. Estos avisos convivirán el miércoles con avisos por tormentas y lluvia en algunas áreas del Pirineo. El alivio térmico no va a implicar una situación un tanto revuelta.
Una nueva vaguada. Y es que el alivio térmico no va a implicar una situación menos revuelta. Una vaguada impulsada por el chorro polar traerá tormentas que podrán ser intensas en zonas del norte y del oeste. Se prevé que lo peor de este episodio comience a notarse el miércoles al norte de la vertiente mediterránea, extendiéndose durante los siguientes días al levante y Baleares.
Según describe el geógrafo Samuel Biener en Meteored, “no se trata de un episodio de lluvias generalizadas, sino de núcleos tormentosos de carácter muy irregular y capaces de generar fenómenos adversos, algo que es habitual en esta época”. El viernes la vaguada irá perdiendo su influencia sobre nuestro territorio.
¿Vuelta al calor? Hacia el fin de semana la situación podría volver a cambiar, lo que parce indicar el regreso del calor para la semana semana que viene. Aunque aún existe incertidumbre, algunos modelos señalan el regreso del calor en altitud, lo que adelantaría la llegada de nuevos episodios cálidos como los que vimos el mes de junio. Puede que más si tenemos en cuenta su proximidad a los días de canícula.
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Imagen | ECMWF
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