6 dudas esenciales sobre los norovirus, y sus respuestas

Los norovirus causan náuseas, vómito y diarrea, y se propagan con gran rapidez. No hay vacuna en su contra, pero sí formas efectivas de prevención.

​Los norovirus causan náuseas, vómito y diarrea, y se propagan con gran rapidez. No hay vacuna en su contra, pero sí formas efectivas de prevención.  

Varias enfermedades tienden a alcanzar su pico de contagios en invierno, debido a las reuniones en interiores que facilitan la propagación de gérmenes. La lista incluye no solo resfriados y gripes, sino también el norovirus.

El norovirus es un virus altamente contagioso que se propaga a través de superficies, alimentos y agua contaminados, y por contacto cercano con personas infectadas. También se le conoce como el “virus del vómito”.

Los médicos descubrieron los norovirus por primera vez en 1972 utilizando un microscopio electrónico. Desde entonces, han encontrado una gran variedad de norovirus, varios de los cuales son contagiosos para los humanos.

A continuación, explicamos lo que hay que saber sobre estos virus y cómo se propagan.

¿Dónde se encuentran los norovirus?

Los norovirus se encuentran en todo el mundo. Son responsables de aproximadamente la mitad de todos los casos de diarrea no bacteriana.

Los niños menores de cinco años, así como las personas débiles y los ancianos, son los más vulnerables. Por eso, las oleadas epidémicas de infecciones suelen afectar a guarderías o residencias para personas mayores.

Existe riesgo de infección en cualquier lugar donde las personas permanezcan confinadas en un espacio durante un período prolongado, como en cruceros, eventos deportivos cerrados y otras grandes reuniones. Epidemias anteriores han afectado a importantes campeonatos y obligado a barcos a entrar en cuarentena cuando muchos pasajeros enfermaron.

Un brote de norovirus causó la hospitalización de cientos de personas en un pueblo italiano en 2024.

¿De dónde provienen los norovirus?

Los norovirus siempre se desarrollan dentro del organismo humano: se multiplican en el tracto gastrointestinal y se propagan por gotitas y contacto, a través de las heces o el vómito.

Las trazas más pequeñas son suficientes para infectar a una persona sana: de 10 a 100 partículas de virus son suficientes.

Tocar la manija de una puerta ligeramente sucia después de ir al baño y luego comer algo con la mano puede causar contagio grave, tras un tiempo de incubación de tan solo seis a cincuenta horas.

¿Pueden infectarme los alimentos?

Un norovirus puede permanecer en un entorno determinado durante bastante tiempo. Esa es una de las formas en que regresa, a través de la cadena alimentaria, al estómago humano.

Las frutas y verduras pueden ser portadoras de un norovirus, por ejemplo, si se utilizaron heces como fertilizante o si los trabajadores agrícolas no se lavaron bien las manos antes de recoger la fruta.

Otro culpable: los mariscos procedentes de zonas donde las aguas residuales sin tratar desembocan en ríos, lagunas o mares.

Por último, el agua potable también puede ser un problema si las tuberías de agua “limpia” pasan cerca de las tuberías de aguas residuales; si se producen cortes frecuentes de agua y la presión en la tubería de agua potable baja, puede entrar agua contaminada. Lo mismo puede ocurrir si una fosa séptica se encuentra demasiado cerca de un pozo de agua potable.

¿Cuánto tiempo es contagiosa una persona infectada?

El mayor peligro para los demás es durante el período en que se manifiesta la enfermedad (diarrea y vómitos), pero también hasta dos días después de que los síntomas hayan desaparecido por completo.

Después de eso, el virus puede seguir excretándose durante dos semanas o más. Durante ese tiempo, cualquier persona en contacto con infectados debe seguir estrictamente las normas de higiene.

¿Cómo puedo tratar la infección?

Médicamente, no se puede hacer mucho. Si el paciente ha perdido mucho líquido, puede ser necesario administrar infusiones, especialmente en niños pequeños y ancianos.

Sin embargo, no existe ningún medicamento contra los norovirus. Los pacientes deben aislarse lo mejor posible para prevenir contagios. Y los cuidadores deben tomar precauciones adicionales.

¿Cómo puedo protegerme?

No existe una vacuna que proteja contra los norovirus. Lo único que ayuda es lavarse y desinfectarse las manos o las manijas de las puertas y otras superficies con las que se entra en contacto regularmente; esto incluye teclados, controles remotos, inodoros, etc.

Cuando los cuidadores estén en contacto con personas infectadas, deben usar guantes de goma, mascarilla quirúrgica y bata. La ropa debe lavarse con agua caliente.

En cuanto a la comida, pele las frutas y cocine las verduras. Y hay otra posible medida que sin duda no está de más: pruebe a beber mucho jugo de limón. Si bien aún no hay pruebas científicas definitivas de que combate a los norovirus, por lo menos hay evidencia sólida que sugiere que sí resulta útil para recuperar la salud.

(elm)

​Deutsche Welle: DW.COM – Ciencia y Tecnologia