La preocupación se encendió en Green Bay durante la jornada dominical de la NFL, luego de que Micah Parsons tuviera que abandonar el partido ante los Denver Broncos por una lesión en la rodilla izquierda.
El defensivo estelar de los Packers cayó sin contacto mientras intentaba capturar al mariscal de campo Bo Nix, una acción que de inmediato generó alarma tanto en el cuerpo técnico como en la afición, especialmente por la forma en la que se produjo el percance.
Parsons fue asistido para salir del campo y trasladado al vestidor para una evaluación más profunda, quedando en duda su regreso al encuentro. La situación se agravó para los Packers, que ya habían perdido a Christian Watson y al ala cerrada Josh Whyle por lesiones que los dejaron fuera del resto del juego.
A la espera de estudios médicos que determinen la gravedad del problema, en Green Bay ya temen lo peor: perder a una de sus piezas clave en un momento decisivo de la temporada.
Especialistas en medicina deportiva como el Doctor Jesse Morse han señalado que el percance ocurrió sin contacto, durante un intento de captura, y que el ángulo del último apoyo de la pierna izquierda no fue favorable. Este tipo de mecanismos suele generar mayor preocupación, ya que incrementa el riesgo de una lesión grave en la rodilla.
Aunque existe inquietud por una posible afectación en el ligamento cruzado anterior, todavía hay margen para el optimismo, pues en el mejor de los escenarios, el problema podría tratarse de un esguince leve acompañado de un golpe óseo, lo que reduciría de forma considerable el tiempo de recuperación.
El posible regreso de Micah Parsons dependerá directamente del diagnóstico final que arrojen los estudios médicos en su rodilla izquierda. En caso de tratarse de un esguince leve o una contusión ósea, el defensivo de los Green Bay Packers podría perderse solo algunos partidos y volver en el corto plazo, una vez que recupere estabilidad y fuerza. Sin embargo, si se confirma una lesión más grave, el tiempo de recuperación se extendería de forma considerable, poniendo en duda su disponibilidad para el resto de la temporada.
