Raúl Varela rreflexionó en su editorial de este lunes en La Tribu sobre el convulso presente de Vinicius Junior. El brasileño, protagonista en el último Clásico por su reacción al ser sustituido, fue analizado en profundidad por el comunicador, que considera que el delantero del Real Madrid vive “un punto de no retorno” en su relación con el club blanco.
Varela comenzó su análisis recordando el origen del futbolista: “Nada en la vida de Vinicius ha sido normal. Desde que nació en Sao Gonçalo, la favela más pobre y peligrosa de Río de Janeiro, hasta hoy, donde disfruta de todas las oportunidades habidas y por haber para convertirse en leyenda del club deportivo más importante del mundo”, afirmó.
El periodista subrayó que la trayectoria del brasileño ha estado marcada por la excepcionalidad: desde su irrupción en el Flamengo hasta su fichaje por el Real Madrid. “Todo en Vinicius fue anómalo: su llegada a la élite, su precio desorbitado, el mordisco de bienvenida, el muñeco colgado en la M30 y las denuncias por racismo”, relató, aludiendo a los episodios de tensión que han acompañado al futbolista desde su aterrizaje en España.
El momento de mayor crítica llegó al hablar del Clásico disputado en el Santiago Bernabéu, donde el brasileño volvió a ser protagonista. “Vinicius fue imagen de un Clásico decepcionante por juego pero emocionante por el resultado“, recordó Varela, que señaló directamente al técnico: “La decisión incomprensible de Alonso de sustituirlo por un Rodrygo inoperante fue un error evidente”.
Según explicó el periodista, los gestos del jugador tras la sustitución y su actitud en el banquillo reflejan una situación que “viene de lejos”. “Se rompió el amor”, sentenció. Varela considera que desde la salida de Ancelotti “algo hizo crack” entre Vinicius y el club: “Las suplencias, las sustituciones, la falta de diálogo y el desgaste personal han deteriorado la relación“.
El comunicador también valoró las palabras del actual entrenador blanco tras el partido, reconociendo que debe hablar con su jugador. “El que manda es el entrenador, el club y el equipo están por encima de los egos individuales, y los gestitos se los guarda para Copacabana”, añadió.
Lo mimaron, lo protegieron, lo malcriaron y ahora son incapaces de reconducirlo
Raúl Varela, en La Tribu
Varela cerró su editorial con una reflexión contundente sobre el futuro del brasileño: “Lo mimaron, lo protegieron, lo malcriaron y ahora son incapaces de reconducirlo. Donde dice ‘me voy’, en realidad está diciendo ‘me van’. Una derrota de todos”, apuntó el periodista, resumiendo la situación como un fracaso compartido entre jugador, cuerpo técnico y club.
