Cam Schlittler, el lanzador de los New York Yankees, se convirtió en el protagonista de una de las mejores actuaciones de postemporada que se recuerdan, al dominar por completo a los Boston Red Sox en el tercer juego de la Serie Wild Card.
Para Schlittler, cuya ciudad natal, Walpole, Massachusetts, se encuentra cerca de Boston, la victoria fue mucho más que un triunfo deportivo, fue una compleja mezcla de éxito profesional y rivalidad personal con la misma ciudad, algo que le trae recuerdos, pero también problemas.
El joven de 24 años se alzó con una impresionante blanqueada de ocho entradas, propinando 12 ponches sin ceder ni una sola base por bolas para eliminar a los Red Sox. La victoria era especialmente significativa dado que su propia familia, inicialmente fanática de Boston, tuvo que cambiar de equipo para apoyarlo.
Sin embargo, no toda su gente celebró con entusiasmo. Schlittler reveló que la mayoría de sus amigos y parientes, fanáticos acérrimos de los Red Sox, se sintieron visiblemente “molestos” después de su estelar actuación. La respuesta del lanzador de los Yankees fue típicamente pragmática y un poco punzante, sobre todo considerando el dolor de la eliminación.
“Les dije que eso es exactamente lo que iba a pasar,” comentó Schlittler a la prensa, justo antes de la Serie Divisional. Con un toque de humor, agregó: “Ya se les pasará. Se acerca la temporada de hockey, se acerca la temporada de baloncesto. Así que estoy seguro de que tienen otras cosas que los distraigan”.
El comentario del jugador de los Yankees generó risas por un lado, pero también molestia por otro, tanto así, que en las redes sociales hubo bastante reacción al respecto y la familia del jugador se vio involucrada.
La rivalidad no se limitó al campo, pues Schlittler también reveló que su madre, Christine, fue acosada en redes sociales antes del partido. Este incidente la obligó a privatizar su cuenta, un hecho que decepcionó profundamente al lanzador, ya que él mismo había formado parte de la afición de los Red Sox.
Fuera de los comentarios y las polémicas, lo cierto es que Schlittler ha podido aprovechar sus oportunidades en el equipo y empieza a ganar confianza con su rendimientos, de seguir así, probablemente siga ganando “enemigos” desde una ciudad que antes fue su hogar.