En la lista de inscritos de la NLS9, el nombre de Max Verstappen fue el que más revuelo causó. El tetracampeón de F1 debutó en competición en GT3 y lo hizo con éxito, ya que él y su compañero de equipo Chris Lulham ganaron la carrera en la clase SP9, la máxima categoría de la NLS. La actuación del holandés despertó una gran expectación, ya que congregó a muchos más espectadores de lo que suele ser habitual en una carrera de la NLS, sobre todo cuando se acerca el final de la temporada y la mayoría de los equipos no se presentan tan rápido en el Infierno Verde tras las 24 horas de Nürburgring.
Sin embargo, había otro nombre en la misma clase SP9 con una historia especial: Jann Mardenborough. Compartió el Ford Mustang GT3 #9 del Haupt Racing Team con Dennis Fetzer y Fabio Scherer, el equipo que finalmente terminó segundo en la categoría Pro y en la clasificación general. Para Mardenborough, esa carrera supuso su regreso al Nordschleife después de una década. En 2015, Mardenborough sufrió otro accidente de horror en la misma pista. En “Flugplatz”, una rápida curva a derechas tras una pronunciada subida, su Nissan GT3 voló por los aires, aterrizando en la zona con espectadores. Un aficionado murió y varios más resultaron heridos.
Mardenborough tuvo que esperar mucho tiempo para su regreso al Nordschleife, aunque si hubiera dependido de él no habría sido así. “Incluso después de 2015, mi intención era volver inmediatamente, pero por aquel entonces conducía para otro fabricante”, explica Mardenborough, que encontró su camino en el automovilismo a través de la Nissan GT Academy y comenzó así como piloto sim. “Personalmente, quería volver enseguida, pero mi carrera me llevó a Japón. Hace dos años podría haber tenido la oportunidad de volver aquí, pero no era el momento adecuado”.

Jann Mardenborough reapareció en el Nordschleife después de una década.
Foto de: Paola Depalmas
“La película exigía bastante atención y no quería usarla como excusa para venir aquí”, se refiere a la película Gran Turismo, que recoge su trayectoria en el automovilismo. “Quería venir aquí como piloto oficial. Ahora era el momento adecuado. Había ocurrido hace 10 años. Así que me saqué la licencia a principios de este año. Simplemente vine aquí, no utilicé otro nombre como Franz Hermann”, señala al pseudónimo de Max Verstappen, utilizado durante un test anterior con el GT3. “No publiqué nada al respecto, pero acabo de obtener mi licencia con la esperanza de competir en las 24 Horas de Nürburgring este año. No he podido ganar, pero sin duda es mi objetivo para el año que viene. Me encanta este lugar. Es mi circuito favorito del mundo. Es absolutamente increíble”.
En los últimos compases de la NLS9, fue Mardenborough quien tomó el volante y consiguió conducir el Ford Mustang hasta la meta. Vio cómo la diferencia con el Ferrari de Verstappen y Lulham se reducía de más de un minuto a poco más de 20 segundos, en parte debido a las zonas de código 60 -en las que se permite a los pilotos circular a un máximo de solo 60 km/h debido al peligro en la pista-, pero aun así tuvo que conformarse con el segundo puesto. “Yo arriesgué al máximo”, reflexionó sobre su último stint. “Intenté adelantar a ese Ferrari y conduje casi a tope. Hubo momentos en los que estaba en la hierba, sólo apretaba. Esperaba tener suerte con el tráfico o con un código 60 para reducir un poco la diferencia, pero no pudo ser. Tendré que regresar para volver a subir a lo más alto del podio”.
¿Si la pista ha cambiado un poco con respecto a hace diez años? “Desde mi incidente en Flugplatz, es más redonda. Ahora el coche no se despega del suelo”, señala el británico como la mayor mejora. “Y, por supuesto, se ha reasfaltado en muchos sitios, así que el nivel de agarre es mayor ahora que antes”.
Todas las demás curvas son más o menos iguales. Quizá el perfil sea un poco más redondeado, pero Flugplatz es realmente diferente”.
Por ahora, Mardenborough espera que esta carrera haya sido el inicio de un regreso más serio al Nordschleife. “Espero que Ford Racing y HRT me inviten a volver. Esta carrera fue sinceramente inesperada”, admite el británico. “En realidad, sólo iba a participar en la carrera GT World Challenge Endurance, así que ya veremos. Sin duda lucharé por conseguirlo, pero al final yo sólo puedo controlar lo que yo puedo controlar”.