Ciencia y Tecnología
La1 ha conseguido por primera vez que todos sus programas superen el 10% de audiencia. La pregunta es a qué precio
La 1 de RTVE ha logrado por primera vez que todos sus programas diarios superen el 10% de cuota de pantalla. Todo un logro que, sin embargo, pone unas cuantas preguntas sobre la mesa: ¿es un cambio sostenible o una sorpresa puntual? Y más allá: ¿lo ha hecho rebajando su categoría de televisión pública, bajando al barro para competir? ¿Se mantendrán estos programas y enfoques una vez haya un giro en el gobierno? Muchas preguntas a partir de una cifra de share ciertamente notable y que marca un antes y un después para la Corporación.
Las cifras. Ese 10% de cuota se produjo el pasado lunes 22 de septiembre, cuando también se alcanzó un promedio del 12,5% de share. Es decir, solo por detrás de Antena 3 y su 13,9% de media. En la franja matinal, sobresalieron el ‘Telediario Matinal’ (20,2%) y ‘La hora de La 1’ (17,6%). ‘Mañaneros 360’ mantuvo una doble emisión con resultados muy sólidos (15,5% y 11,1%) y el ‘Telediario 1’ del mediodía destacó con 14% de share.
Por la tarde, ‘Directo al grano hizo 10,4% y superó a sus competidores de Telecinco y Cuatro. ‘Valle Salvaje’ (11,4%) y ‘La Promesa’ (12,5%) siguieron líderes y ‘Malas lenguas’ hizo récord propio con 10,6%. ‘Aquí la Tierra’, finalmente, hizo 11,7%. El bloque nocturno, ya con programas principalmente no diarios, se compuso de ‘Telediario 2’ (12,1%), ‘La Revuelta’ (11,7%) y ‘MasterChef Celebrity’ (13,7%).
Cómo se ha hecho. Las cifras se han conseguido con una reorganización a fondo de la parrilla, con cuatro magacines que cubren actualidad y política, y una apuesta decidida por formatos de entretenimiento y directos, y abarca desde el ‘Telediario Matinal’ a las 6:00 hasta el final de ‘MasterChef Celebrity’ de madrugada, todos con cuotas de dos dígitos. Es la clave para entender la nueva estrategia de La1: mayor peso de magazines informativos, entretenimiento competitivo y programación para públicos diversos.
Bajar al barro. Puede que el intento de reciclar los mimbres de ‘Sálvame’ no funcionaran en audiencia, pero las intenciones estaban claras: competir directamente con las cadenas privadas. Pero aquí nos encontramos el primer dilema de este éxito de La1: se difuminan las fronteras entre televisión pública y entretenimiento propio de las cadenas privadas. Hay quien denuncia una suerte de “telebasura encubierta“, que se va manifestando en fórmulas comerciales como patrocinios, promociones y product placement, lo que ha llegado incluso a ganarle algunas sanciones al Ente en programas como ‘Gran Prix‘ o ‘MasterChef’.
Políticos en RTVE. Esto nos lleva a la cuestión política. La actual composición del Consejo de Administración de RTVE, con mayoría de consejeros afines al bloque gubernamental, está siendo percibida como excesivamente politizada, con dudas sobre la pluralidad informativa y la representatividad de la programación. Muchos críticos ven una abierta filiación progubernamental en presentadores como Silvia Intxaurrondo (que se ha tenido que defender de las ausaciones de favorecer el gobierno), Javier Ruiz o Jesús Cintora (este último en La 2, y ambos investigados por la propia RTVE tras unas quejas de vulneración de la pluraridad y el rigor)
La cuestión sobre la mesa es: ¿prioriza esta nueva RTVE perfiles y contenidos alineados con los intereses de la dirección, elevando el riesgo de censura indirecta o sesgo sistemático? Puede que algo tenga que ver con el renovado éxito de La1, pero… ¿tiene continuidad?
Nada es para siempre. Sea real o percibida esta filiación política (que también se ha plasmado en decisiones tan significativas como el abandono de Eurovisión), lo que está claro es que podría suponer un riesgo para todos estos programas cuando se produzca un cambio de orientación política en el Gobierno. El propio Ruiz parece reflexionar sobre ello en esta entrevista con El País, donde asume que acabará fuera del Ente una vez haya un giro en el Gobierno.
Ya se hablaba de ello en torno a Broncano, que tiene el programa más mediático, pero si se entiende que la parrilla al completo está marcada por una orientación concreta, estos programas (y audiencias) peligrarían. En ese caso, La1 tendría que poner sobre la mesa si le interesa más la audiencia o la fidelidad a quien ocupe la Moncloa.
Polémicas de toda la vida. Desde hace décadas, RTVE ha sido objeto de vaivenes políticos constantes que condicionan su gestión y programación, poniendo difícil su independencia efectiva. En 2006, el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero impulsó una reforma importante con la Ley 17/2006 de la Radio y la Televisión de titularidad estatal, cuyo objetivo era independizar la corporación del poder político para garantizar estabilidad, pluralidad y autonomía similar al modelo de la BBC. La ley concebía a RTVE como una corporación con capital público, regulada como sociedad mercantil, con un consejo nombrado por consenso en el Parlamento con mayoría cualificada y mandatos largos para evitar interferencias políticas.
Sin embargo, esta reforma ha estado socavada históricamente por los conflictos políticos. Sucesivos gobiernos, especialmente el del PP tras Zapatero, alteraron las condiciones para retomar un control más directo, como sucedió cuando se eliminó la mayoría cualificada para nombrar a los consejeros y devolviendo al Ejecutivo mayor capacidad de influencia sobre la dirección de RTVE. Estas medidas recientes han debilitado la independencia formal que pretendía alcanzarse y vuelto a poner el control en manos partidistas.
Cabecera | RTVE
En Xataka | 739 millones de euros: una auditoría de Hacienda apunta a un posible agujero presupuestario en RTVE
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La noticia
La1 ha conseguido por primera vez que todos sus programas superen el 10% de audiencia. La pregunta es a qué precio
fue publicada originalmente en
Xataka
por
John Tones
.
La 1 de RTVE ha logrado por primera vez que todos sus programas diarios superen el 10% de cuota de pantalla. Todo un logro que, sin embargo, pone unas cuantas preguntas sobre la mesa: ¿es un cambio sostenible o una sorpresa puntual? Y más allá: ¿lo ha hecho rebajando su categoría de televisión pública, bajando al barro para competir? ¿Se mantendrán estos programas y enfoques una vez haya un giro en el gobierno? Muchas preguntas a partir de una cifra de share ciertamente notable y que marca un antes y un después para la Corporación.Las cifras. Ese 10% de cuota se produjo el pasado lunes 22 de septiembre, cuando también se alcanzó un promedio del 12,5% de share. Es decir, solo por detrás de Antena 3 y su 13,9% de media. En la franja matinal, sobresalieron el ‘Telediario Matinal’ (20,2%) y ‘La hora de La 1’ (17,6%). ‘Mañaneros 360’ mantuvo una doble emisión con resultados muy sólidos (15,5% y 11,1%) y el ‘Telediario 1’ del mediodía destacó con 14% de share. Por la tarde, ‘Directo al grano hizo 10,4% y superó a sus competidores de Telecinco y Cuatro. ‘Valle Salvaje’ (11,4%) y ‘La Promesa’ (12,5%) siguieron líderes y ‘Malas lenguas’ hizo récord propio con 10,6%. ‘Aquí la Tierra’, finalmente, hizo 11,7%. El bloque nocturno, ya con programas principalmente no diarios, se compuso de ‘Telediario 2’ (12,1%), ‘La Revuelta’ (11,7%) y ‘MasterChef Celebrity’ (13,7%).
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