Bahoruco. – La Procuraduría Especializada para la Defensa del Medio Ambiente y los Recursos Naturales, con asiento en Neiba, fue apoderada de una querella que busca la clausura definitiva de una discoteca recientemente cerrada por las autoridades.
El establecimiento, cuyo nombre hace referencia a un estupefaciente, había generado intranquilidad entre los residentes de la zona, quienes denunciaron altos niveles de ruido y desórdenes en el entorno.
Este caso recuerda a lo sucedido en Baní, donde hace pocas semanas las autoridades impidieron la apertura de otra discoteca que pretendía operar bajo el nombre de “Sinaloa Drink”, también considerado como un estímulo indirecto al narcotráfico.
Las autoridades recordaron que el artículo 36 de la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas prohíbe de forma expresa “cualquier tipo de publicación, publicidad, propaganda o programas a través de los medios de comunicación, que contengan estímulos y mensajes subliminales, auditivos, impresos o audiovisuales que tiendan a favorecer el consumo y el tráfico ilícito de drogas y sustancias controladas”.
En ese sentido, el Ministerio Público busca sentar precedentes frente a negocios cuyos nombres o actividades puedan interpretarse como una apología al consumo de sustancias prohibidas, además de garantizar el derecho de los ciudadanos a un ambiente sano y tranquilo.