Han pasado casi dos décadas desde que Willie Randolph fue despedido como mánager de los Mets de Nueva York en 2008, Pero pareciera que hubiese sido ayer. Al menos ese es el sentimiento de muchos de sus seguidores y para el propio Randolph.
Randolph, de 71 años, expresó recientemente en una entrevista reciente que aún no logra entender por qué fue apartado de su cargo y, más aún, por qué nunca volvió a recibir otra oportunidad como dirigente en las Grandes Ligas.
En diálogo con el programa “BT and Sal” de WFAN, el exjugador y mánager compartió sus reflexiones sobre aquella etapa. “Me quitaba el sueño pensar en eso, me dio agitación muchas veces”, confesó.
Hasta el día de hoy no puedo entender por qué. Pensé que al tener cierto éxito en esta ciudad, uno tenía algo de crédito acumulado. Pero no tengo ni idea de cómo o por qué ocurrió
Randolph
Willie Randolph fue cinco veces All-Star con los Yankees entre 1976 y 1988, fue nombrado mánager de los Mets en 2005, por lo cual es considerado toda una leyenda del conjunto neoyorquino.
A pesar de los sentimientos encontrados, Randolph recuerda su etapa dorada con los Yankees con cariño, la que describió como un momento de enorme orgullo personal.
Crecí siendo fanático de los Mets, crecí en la ciudad. Fue un gran honor ser el primer afroamericano en dirigir un equipo de Nueva York
Randolph
Más allá del impacto de su despido, lo que más pesa para Randolph es no haber tenido otra oportunidad como mánager en la MLB. “Me dolió no poder seguir creciendo. Como mánager joven uno comete errores, pero va aprendiendo. Yo sentía que estaba progresando”, afirmó.
En 2009 entrevistó para el puesto de mánager de los Cerveceros, que terminó yendo a Ken Macha. Luego trabajó dos años en el cuerpo técnico de Milwaukee y en 2011 se unió al staff de los Orioles bajo la dirección de Buck Showalter. Sin embargo, nunca volvió a tener el cargo principal.
“Todavía me molesta un poco, para ser sincero. Sentí que podía haber sido una inspiración para muchos afroamericanos que no tienen esa oportunidad, ni siquiera una segunda”, lamentó Randolph.
Sentí que había acumulado suficiente respeto para que me dieran al menos otra chance
Randall
Randalph lamentó profundamente el no ser considerado nuevamente por los Yankees. No obstante su legado es imborrable y siempre será reconocido como uno de los grandes ídolos de la Gran Manzana.