El Bernabéu volverá a rugir una noche más

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Es una noche hecha a la medida del Real Madrid; “Una noche que puede entrar en la historia”. La frase, pronunciada por Bellingham en la conferencia de prensa, no fue sino constatar una fe inquebrantable de los jugadores y aficionados blancos que, desde que acabó el partido en Londres, sólo piensan en la remontada. Y así ha venido siendo desde entonces: poco a poco, lentamente, cociéndose algo que el Bernabéu ya ha vivido en otras ocasiones y que alcanzará su punto álgido a las 21:00. El santuario blanco sólo se silenciará un minuto para guardar respeto con silencio sepulcral por el fallecimiento de Leo Beenhakker. Antes y después, la locura se desatará en las gradas. Una locura que se ha venido fragüando desde el pasado martes. Pese a lo abultado del marcador, fueron los propios jugadores blancos quienes han venido alentando dicha idea. Fueron Courtois, Asencio y Lucas quienes encendieron la espita. Les acompañó Ceballos: “El miércoles esperamos una atmósfera increíble en el Bernabéu para darle la vuelta a un resultado muy complicado. Os esperamos, porque os necesitamos más que nunca”.

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 La afición, que ha estado yendo a Valdebebas estos días a jalear a los futbolistas creará un gran ambiente en la previa.  

Es una noche hecha a la medida del Real Madrid; “Una noche que puede entrar en la historia”. La frase, pronunciada por Bellingham en la conferencia de prensa, no fue sino constatar una fe inquebrantable de los jugadores y aficionados blancos que, desde que acabó el partido en Londres, sólo piensan en la remontada. Y así ha venido siendo desde entonces: poco a poco, lentamente, cociéndose algo que el Bernabéu ya ha vivido en otras ocasiones y que alcanzará su punto álgido a las 21:00. El santuario blanco sólo se silenciará un minuto para guardar respeto con silencio sepulcral por el fallecimiento de Leo Beenhakker. Antes y después, la locura se desatará en las gradas. Una locura que se ha venido fragüando desde el pasado martes. Pese a lo abultado del marcador, fueron los propios jugadores blancos quienes han venido alentando dicha idea. Fueron Courtois, Asencio y Lucas quienes encendieron la espita. Les acompañó Ceballos: “El miércoles esperamos una atmósfera increíble en el Bernabéu para darle la vuelta a un resultado muy complicado. Os esperamos, porque os necesitamos más que nunca”.

Dicho y hecho. Le siguieron sus propios compañeros, los aficionados que han estado yendo a Valdebebas estos días, donde han jaleado a los futbolistas bien con gritos de ánimo, bien con pancartas… Poco a poco el incendio (o la creencia) se ha ido montando…

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El punto álgido previo es la busiana que se celebra cada partido importante, para recibir al autobús blanco en la Plaza de los Sagrados Corazones… Ya es habitual que los jugadores vibren con el recibimiento que les suelen hacer, sobre todo desde la cuesta de Concha Espina, donde la gente se empieza a amontonar prácticamente una hora antes de que lleguen (suele ser sobre las 19:00). En Valdebebas, los jugadores serán despedidos con un pasillo de honor por los chavales de las categorías inferiores, como ya hicieran ante el City y el Atleti. En el estadio habrá también el habitual tifo. Estos días se ha visto algo: un endemoniado seguidor blanco, sujetando una Champions con la frase: “La Liga de Campeones, mi obsesión”. Al lado colgaron una pancarta: “Todos de blanco”. Todo para convertir el Bernabéu en una nueva caldera blanca… Las semifinales esperan.

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