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La polémica: manotazo a Bellingham, protestas en el 3-3, una posible roja…
Un penalti al limbo que reclamó el Real Madrid. En el minuto 48 del partido (con 1-1 en el marcador y 2-1 en el global de la eliminatoria) de vuelta de semifinales de la Copa del Rey contra la Real Sociedad, el equipo de Ancelotti reclamó una pena máxima por un manotazo de Alex Remiro a Jude Bellingham en la salida de un córner. Ni Alberola Rojas lo peritó ni Trujillo Suárez le avisó desde el VAR para revisar la jugada.
Iturralde González analiza la pena máxima que reclamó el Real Madrid en la acción entre el portero de la Real y el inglés en el minuto 48.
Un penalti al limbo que reclamó el Real Madrid. En el minuto 48 del partido (con 1-1 en el marcador y 2-1 en el global de la eliminatoria) de vuelta de semifinales de la Copa del Rey contra la Real Sociedad, el equipo de Ancelotti reclamó una pena máxima por un manotazo de Alex Remiro a Jude Bellingham en la salida de un córner. Ni Alberola Rojas lo peritó ni Trujillo Suárez le avisó desde el VAR para revisar la jugada.
Una acción que, para Iturralde González, debió ser castigada: “Es penalti eso, es temerario”, sentencia el árbitro de AS y la Cadena SER. “Es que hay movimiento de brazo. Si no es amonestación, sería residual y no entra el VAR, pero es que hay movimiento de brazo y le pega un sopapo”, explicaba el colegiado en la retransmisión en directo de Carrusel Deportivo.
La Real protestó un fuera de juego de Mbappé en el 3-3
Tchouameni marcó el 3-3 al rematar de cabeza un saque de esquina. Un córner que fue protestado con vehemencia por los jugadores de la Real Sociedad, porque tuvo su origen en una jugada de Vinicius en la que Mbappé estaba en fuera de juego por interferencia. “Mbappé, estando en una posición de fuera de juego, puede llegar a interferir en el defensor de la Real Sociedad”, explica Iturralde. El VAR no pudo entrar a valorar la posición de Mbappé, ya con el córner está considerada una nueva jugada.
La Real reclamó un penalti de Vinicius a Kubo
Mucho antes, con la primera mitad agonizando, y superados los tres minutos anunciados de añadido, los jugadores txuri-urdin reclamaron otra pena máxima, en este caso por un agarrón de Vinicius a Kubo en la frontal del área. La jugada entre el brasileño y el japonés quedó en nada. A juicio de Iturralde, en esta ocasión sí acertó Alberola Rojas.
“Vinicius le encima y cuando Kubo nota el contacto se deja caer. No hay nada. Le tiene agarrado, pero le deja continuar la carrera, que el reglamento habla de sujetar, no de agarrar. Habla de no dejarle continuar la carrera de impedir que vaya a por el balón. Eso no pasa en ningún momento. Cuando ve que no va a llegar al balón, se deja caer”, reiteraba Iturralde.
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