Deporte Motor
Aston Martin abre los ojos

Aston Martin atraviesa uno de los momentos más complejos, desde que Fernando Alonso llegó al equipo. En su primera temporada con la escudería británica (2023), el asturiano sumó un total de ocho podios en la Fórmula 1. Pero desde entonces, el AMR ha ido perdiendo prestaciones con el paso del tiempo. Hasta el punto de que en este comienzo de curso, los de Silverstone están luchando por no ser el último equipo de la parrilla. El casillero de puntos acumula 10 unidades gracias a varios momentos de fortuna para el monoplaza de Lance Stroll. Pero la realidad es que tanto el canadiense como el bicampeón están obligados a pilotar al límite, si quieren extraer un resultado medianamente decente.
La fábrica de Silverstone sabe que tiene trabajo por delante, pero el nuevo túnel de viento les ha dado una visión más clara de qué problemas están lastrando al monoplaza.
Aston Martin atraviesa uno de los momentos más complejos, desde que Fernando Alonso llegó al equipo. En su primera temporada con la escudería británica (2023), el asturiano sumó un total de ocho podios en la Fórmula 1. Pero desde entonces, el AMR ha ido perdiendo prestaciones con el paso del tiempo. Hasta el punto de que en este comienzo de curso, los de Silverstone están luchando por no ser el último equipo de la parrilla. El casillero de puntos acumula 10 unidades gracias a varios momentos de fortuna para el monoplaza de Lance Stroll. Pero la realidad es que tanto el canadiense como el bicampeón están obligados a pilotar al límite, si quieren extraer un resultado medianamente decente.
La zona media de la parrilla está reservada para otras escuderías en estos momentos. Sin embargo, aunque no quieren dar el curso por acabado, la realidad es que en Silverstone miran al futuro. A partir del próximo curso, la Fórmula 1 comenzará una nueva era para la que Aston Martin se ha reforzado es muchos aspectos. El primero de todos, con un Adrian Newey del que esperan un concepto de monoplaza ganador. Y para comprobarlo dispondrán de un túnel de viento de última generación, que pusieron en marcha en la fábrica a mediados de marzo.
Anteriormente, en Aston Martin trabajaban con el túnel de viento de Mercedes. Pero desde que se desempeñan con su propia unidad, ese nuevo “túnel de viento ha abierto nuestros ojos a unas cuantas características.Nos está dando una visión más representativa y más clara de lo que está sucediendo”, reconoce Andy Cowell, team principal de la escudería británica, en la página web de la F1. A lo que aparentemente es buena noticia, le sigue una realidad. Ya que por delante, una vez recogidos todos los datos, deben ponerse manos a la obra: “A partir de ahora tenemos que hacer el trabajo: cambiar las formas, hacer piezas, entender, y luego hacer componentes a tamaño real para llevarlos al circuito y medir en este entorno tan complejo”.
En lo que va de curso, desde Aston Martin no han llevado novedades sobre el asfalto. Simplemente han hecho modificaciones específicas en circuitos específicos, lo que deja más en evidencia todavía que ese proceso de desarrollo será tedioso. Por el momento, en Silverstone están “disfrutando con esta nueva herramienta y esperamos hacer un monoplaza más rápido con ella”. Los datos que recogen del nuevo túnel de viento serán clave para mejorar el rendimiento del monoplaza, pero Cowell deja claro que ese proceso no es inmediato: “Nunca te darán los mismos resultados. Cuando haces el trabajo de desarrollo en un túnel de viento y luego lo cambias a otro, los resultados no serán exactamente iguales. Pero disfrutamos con el nuevo túnel y eso nos ha permitido ver cosas que antes no podíamos”.