La cantera aleja al Málaga del descenso

Pocos puntos poseen más significado que el obtenido por el Málaga en Ipurua. Solo suma uno más en su lucha por eludir el descenso, pero la reacción para hacerlo, los autores de la misma y su mínimo pase adelante clasificatorio, llenan de esperanza las aspiraciones de un club que volvió a demostrar el valor de su cantera. Dos jóvenes jugadores salidos de su base, como Diego Murillo y Rafa Rodríguez, en su segundo partido como profesional, rescataron a un Pellicer que respira momentáneamente aliviado a cuatro puntos de la quema. De la misma manera que lo hace un Eibar que se encuentra un punto más cerca de lograr su actual objetivo: la permanencia. Pese al último empujón de la hinchada azulgrana al borde del final y a sumar nueve jornadas consecutivas como invicto, los blanquiazules son los más beneficiados de la noche.

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 Los goles de Murillo y Rafa en la segunda mitad se sobrepusieron a la iniciativa de un Eibar que mantiene su invicto. Bola extra para Pellicer.  

Pocos puntos poseen más significado que el obtenido por el Málaga en Ipurua. Solo suma uno más en su lucha por eludir el descenso, pero la reacción para hacerlo, los autores de la misma y su mínimo pase adelante clasificatorio, llenan de esperanza las aspiraciones de un club que volvió a demostrar el valor de su cantera. Dos jóvenes jugadores salidos de su base, como Diego Murillo y Rafa Rodríguez, en su segundo partido como profesional, rescataron a un Pellicer que respira momentáneamente aliviado a cuatro puntos de la quema. De la misma manera que lo hace un Eibar que se encuentra un punto más cerca de lograr su actual objetivo: la permanencia. Pese al último empujón de la hinchada azulgrana al borde del final y a sumar nueve jornadas consecutivas como invicto, los blanquiazules son los más beneficiados de la noche.

El técnico boquerón continuó apostando por la línea de cinco implantada en Huesca pero el resultado fue de nuevo negativo. Equipo demasiado estrecho para defender, con poca profundidad para atacar por fuera y que sufría con la movilidad atacante del Eibar. Los azulgranas fueron fieles a su idea. Propositivos para presionar alto, atacar mediante los cambios de orientación y sin fisuras en defensa. Sin embargo, su planteamiento estuvo lejos de salir según lo esperado. Las continuas faltas decretadas por Arcediano Monescillo ralentizaron una de las primeras partes con menos ritmo de la temporada. Hasta la primera media hora de juego, únicamente varios saques de esquina botados en ambos lados de Ipurua generaron la expectación del respetable.

Pese a la festividad de Semana Santa y la distancia considerable con el playoff, Ipurua respondió a los suyos presentando una entrada bondadosa dado el horario. Aunque las 4.396 personas que completaron el feudo eibarrés no escaparon del tiempo aparentemente otoñal que arreciaba sobre el territorio guipuzcoano. Hinchas que con el paso de los minutos entrarían en calor con el penalti a favor de los malagueños que señalaría el trencilla. José Corpas cargó a Dani Sánchez cuando este recién había pisado la línea del área, pero tras previo aviso del videoarbitraje, el ligero contacto enseguida fue desestimado. Para esas, Ipurua ya había entrado en ebullición debido a las protestas y sus jugadores aprovecharon la inercia positiva de la decisión, con su mejor arma. Jon Bautista y Antonio Puertas castigaron la espalda andaluza con sus desmarques de ruptura y en el descuento lo materializaron. Asistencia exquisita de Matheus para el ‘9′ que, tras recortar al meta, la coló a placer.

Con el gol, el Eibar quería más. A pesar del cambio de sistema de Pellicer, los azulgranas castigaron todavía más su línea adelantada y de no ser por Alfonso Herrero o por la posición antirreglamentaria de sus dos hombres más profundos, el partido se hubiera visto sentenciado antes de lo esperado. Sin los cinco defensores atrás, Antoñito Cordero emergió en el extremo zurdo. El canterano, que en los próximos meses firmará con el Newcastle, aparcó por unos minutos su futuro y trató de poner su velocidad al servicio del equipo. Lo intentó a las primeras de cambio con un disparo cruzado, como más tarde también lo haría Larrubia con más acierto. Aun así, la reacción visitante llegaría a balón parado. Un medido saque de esquina que Diego Murillo se encargaría de rematar sin excesiva oposición.

El testarazo del lateral cambió por completo la dinámica de un choque que rápido cogería tintes blanquiazules. Diez minutos más tarde de empatar la contienda, un derechazo desde la frontal de otro canterano como Rafa Rodríguez hizo las delicias de los aficionados malagueños desplazados a Ipurua y limpió de un plumazo sus fantasmas con el descenso. Alegría que rápido sería contenida. Ya que pocos segundos después de hacerlo, un nuevo balón parado neutralizaría el envite. Al igual que en el primer tanto visitante, la zaga andaluza sería la encargada de rematar el envío, pero, en este caso tendría la desgracia de hacerlo en propia meta. Nelson Monte fue el protagonista desafortunado. Todavía quedaban cerca de 20 minutos para finalizar la noche. Suficientes para convertir la cita en un correcalles donde nadie quería darse por vencido. El Eibar lo hizo con más insistencia pero el empate final dejó un regusto mayor en el Málaga.

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Clasificación

Clasificación	PT	PJ	PG	PE	PP
10 COR	50	36	13	11	12
11 DEP	50	36	12	14	10
12 EIB	48	36	12	12	12
13 ALB	48	36	12	12	12
14 SPO	47	36	11	14	11

Clasificación	PT	PJ	PG	PE	PP
15 CAD	46	36	11	13	12
16 CST	46	36	12	10	14
17 MGA	43	36	9	16	11
18 ZAR	41	36	10	11	15
19 ELD	39	36	10	9	17