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Un antidepresivo: Endrick
Es un clásico de resaca europea y, por tanto, de consecuencias imprevisibles. El Madrid llega deprimido, se juega más y trabaja sin red (durmió a siete puntos del Barça). El Athletic no se ha bajado de la euforia en toda la temporada, vislumbra ya una final de Europa League en San Mamés y puede tomarse un receso (sigue el partido en directo en As.com). En cualquier caso, es noche de juicio para el equipo de Ancelotti por parte de una afición que no se vio correspondida el miércoles y una buena oportunidad para que los de Valverde rompan una larguísima racha negra en el Bernabéu, donde no ganan desde hace ya más de veinte años.
El brasileño, que ha marcado siete goles en 565 minutos, posible sustituto de Mbappé y factor clave para congraciar a equipo y afición. Nico Williams, baja.
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Es un clásico de resaca europea y, por tanto, de consecuencias imprevisibles. El Madrid llega deprimido, se juega más y trabaja sin red (durmió a siete puntos del Barça). El Athletic no se ha bajado de la euforia en toda la temporada, vislumbra ya una final de Europa League en San Mamés y puede tomarse un receso (sigue el partido en directo en As.com). En cualquier caso, es noche de juicio para el equipo de Ancelotti por parte de una afición que no se vio correspondida el miércoles y una buena oportunidad para que los de Valverde rompan una larguísima racha negra en el Bernabéu, donde no ganan desde hace ya más de veinte años.
Para empezar, faltará Mbappé, en doble papel de lesionado y sancionado, una ausencia a la que el Madrid no está acostumbrado. El francés solo se ha perdido dos partidos de Liga, con sendos empates blancos, ante Atlético y Rayo, y dos de Copa, con triunfos en Leganés y Anoeta, pero vuelve a estar en el ojo de la crítica. De la derrota ante el Arsenal se llevó un esguince leve y una pitada de pronóstico reservado. No volver al Bernabéu en un tiempo puede aliviar la tensión y darle otra oportunidad a Endrick, cuya actitud convence a Ancelotti, pero al que no encuentra sitio en el equipo.
Los números del novato brasileño son irreprochables. Siete goles en apenas 565 minutos repartidos en 31 partidos (18’ de promedio por choque), lo que revela que es futbolista de efecto inmediato. Aprovecha hasta el hueso el poco tiempo que le da Ancelotti y no defrauda cuando es titular. De hecho, ha marcado en los tres últimos partidos en que lo fue y tiene al público de su parte. Más ahora, cuando ha crecido el descontento con los cuatro fantásticos.
Rotación doble
No será el único cambio en el once. También tienen opciones Fran García como lateral izquierdo; Ceballos, que no ha estado en el equipo inicial desde la vuelta de su lesión; Camavinga, ausente ante el Arsenal por sanción, y Brahim.
En el Athletic se espera una rotación aún más profunda. Ya sucedió tras la ida ante el Rangers cuando Valverde cambió a nueve titulares para el duelo frente al Rayo. Solo repitieron Vivian y Jauregizar. Le salió bien, pero al partido le dio la vuelta cuando entraron los imprescindibles en la segunda mitad. Dos de ellos, Sancet y Nico Williams, hicieron los goles. Pinta que hoy jugarán de inicio algunos de los que Valverde dejó ante el Rangers: Unai Simon, Gorosabel, Unai Núñez, Paredes, Adama, Prados, Iñaki Williams, si se recupera, o Guruzeta. Y no estará Nico Williams, baja a causa de una pubalgia.
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Sea cual sea el once rojiblanco, el Madrid se medirá al mejor Athletic en once años. Desde 2014, también con Valverde, no acaba cuarto, su puesto actual desde la jornada 16, en una Liga. Y es que el club ha reunido probablemente a la mejor generación de futbolistas desde las ligas de Javier Clemente. Siete de ellos tienen un valor de mercado de veinte millones o más. Y diez ni siquiera han cumplido 25 años. Es, pues, un equipo de larguísimo recorrido si el club consigue amarrar a sus figuras.
El último ‘amenazado’ es Jauregizar, candidato claro a jugador revelación del año después de una carrera en cierto modo atípica. Natural de Bermeo, compatibilizó pelota vasca y fútbol hasta los 14 años y jugó en el equipo de su pueblo hasta los 17. Ahí le descubrió el Athletic y el resto de viaje fue meteórico: un año en el juvenil, otro en el segundo filial, el Baskonia, de Tercera Federación, y el pasado, en el Bilbao Athletic, ascenso a Primera Federación incluido y con alguna aparición con el primer equipo. A ese carro principal le subió Valverde definitivamente este verano, en principio en el rol de quinto centrocampista. “La verdad es que no pensaba jugar tanto. Viendo mi pretemporada, que no fue tan buena, y teniendo por delante a Prados, Vesga, Ander Herrera o Ruiz de Galarreta… No me veía a ese nivel. Pero empecé a jugar, a ir hacia adelante y las cosas me salieron bien”.
Su crecimiento empujó a Ander Herrera a fichar por Boca Juniors este invierno y llegado abril ya es el mediocentro más utilizado del equipo, entre otras razones porque es el segundo jugador de la Liga que más balones recupera en campo contrario. Apodado ya ‘Jaurewizard’, ha disputado los tres últimos amistosos de la Selección Sub-21 y su cotización, que era de 800.000 euros en verano, alcanza los veinte millones. Con contrato hasta 2027, el Athletic se mueve ya para alargarlo ante las ofertas que le rondan. Este invierno rechazó una del Milan y el City sigue sus pasos. “Es de los jugadores más importantes del equipo. Su partido fue espectacular”, dijo Valverde de su actuación ante el Rayo la semana pasada. Por su despliegue físico y su verticalidad podría decirse que es el Fede Valverde del Athletic.
El Haaland de San Mamés
También ha sido un refuerzo importante en el mercado invernal Maroan Sannadi, ariete de despertar aún más tardío que Jauregizar. Vitoriano, hijo de marroquíes, se inició en un club convenido por el Athletic, el Lakua, y de ahí pasó al Aurrerá, donde completó todo el ciclo de las categorías inferiores. Ya como senior fichó por el Ariznabarra, de Tercera, en lo que parecía un paso atrás definitivo, pero en 2021 pasó al San Ignacio, segundo filial del Alavés, y de ahí, al B, en el que estuvo otros dos años y renovó contrato. El pasado verano fue cedido al Barakaldo, metió once goles en cinco meses y en enero el Athletic pagó por él 4,5 millones. Ahora, ya con 24 años, se reparte los minutos con Guruzeta. Sus 192 centímetros le convierten en un arma aérea de primer nivel dentro de un equipo que ya domina bien esa suerte (con doce tantos, el Athletic es líder en tantos de cabeza en la Liga).
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Por detrás de él se mueve un frente de ataque de alcance internacional. Nico Williams, queya ha batido su récord de goles en una temporada (once), es baja, pero estará su hermano Iñaki (diez asistencias), ausente ante el Rangers por unas molestias. El tercer hombre es Oihan Sancet, en el Athletic desde los quince años procedente de la cantera de Osasuna y máximo anotador nacional (quince tantos). Una lesión a finales de febrero le tuvo un mes fuera y le ha costado el reingreso, pero vuelve a estar en máximos. Le hizo dos goles al Rayo el domingo pasado y otro al Rangers el jueves. No va con la Selección desde marzo de 2024, pese a Luis de la Fuente le conoce bien porque estuvo en todos los equipos nacionales inferiores a los dirigió, pero su precio de mercado anda ya en 60 millones. El Madrid está en peligro.
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