Cine
Sólo dura hora y media, está basada en un estremecedor hecho real, y unió a la estrella y el director de ‘Los pecadores’
El cine indie es un rincón especial y necesario, porque ofrece a cineastas emergentes la oportunidad de empezar a trabajar y encontrar su voz, además de empezar a destacar en la industria. De ahí pueden salir los que son los grandes cineastas del momento, subiendo poco a poco a partir de una base b…
Artículo original publicado en SensaCine
Un drama cercano y especial
El cine indie es un rincón especial y necesario, porque ofrece a cineastas emergentes la oportunidad de empezar a trabajar y encontrar su voz, además de empezar a destacar en la industria. De ahí pueden salir los que son los grandes cineastas del momento, subiendo poco a poco a partir de una base bien sólida.
Es lo que sucedió con Fruitvale Station, que fue el debut de un Ryan Coogler que luego ascendió a hacer películas como Creed o Black Panther, y ahora nos entrega la prometedora Los pecadores. En esta primera película se junta con Michael B. Jordan, su actor de referencia que también lidera su último blockbuster, y juntos hacen un exquisito drama de menos de hora y media.
Hayward, California, Nochevieja de 2008. Oscar Grant, un hombre negro de 22 años, y Sophina, su novia latina, tienen una hija en edad preescolar, Tatiana. Oscar no es perfecto, ya que es un ex convicto, le han pillado engañando a Sophina y ha perdido su trabajo hace dos semanas en el supermercado local por impuntualidad. Un desempleo que aún no ha comunicado a nadie con la esperanza de recuperar el trabajo.
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Estos baches están en el proceso de que Oscar intente realmente dar un giro a su vida, no sólo por el bien de Sophina y Tatiana, sino por su verdadero amor por ellas y por su madre, Wanda, cuyo apoyo y duro amor han fomentado ese deseo de ser mejor persona. Ese camino hacia una vida mejor sufre otro gran revés esa noche, cuando él y Sophina toman el BART hacia San Francisco para celebrar el año nuevo. Ese revés concreto se produce en un incidente en la estación de Fruitvale, en Oakland, de camino a casa.
‘Fruitvale Station’: una trágica historia real
Coogler dirige y escribe este guion a partir de la historia real de Oscar Grant, un joven hombre azotado por la tragedia que vivía en la Bay Area de California de la que también procede el cineasta. Su motivación era poder acercar a la gente a la persona que era antes del terrible suceso que le llevó a ser noticia en los periódicos, intentando hacer más auténtica la gravedad de su historia.
Su manera de abordar la historia con cercanía y sensibilidad, creando también una buena sociedad con Michael B. Jordan que da una interpretación sensacional, hace de este un drama realmente especial. Uno donde se puede apreciar a dos colaboradores encontrando una relación especial que deciden llevar a nuevos niveles con cada proyecto, haciendo de esta una película que crea unos cimientos formidables.
Puedes ver Fruitvale Station en alquiler.
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