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Mbappé pide perdón

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Tras el pecado, la virtud del arrepentimiento. Kylian Mbappé vio la roja en Mendizorroza por una durísima patada al exmadridista Antonio Blanco y desde el mismo vestuario quiso pedir perdón. Lo hizo en persona con el futbolista alavesista, al que fue a ver al vestuario babazorro, pero también se mostró apesadumbrado ante sus propios compañeros. Según pudo saber AS, Mbappé se disculpó con ellos por haberles dejado durante sesenta minutos con uno menos en un partido tan áspero. Un cruce de cables en el que no buscó excusas. Vuelve de Vitoria muy molesto consigo mismo.

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 El crack se disculpó personalmente con Blanco por su dura patada y también lo hizo con sus propios compañeros. Vuelve de Vitoria muy molesto consigo mismo.  

Tras el pecado, la virtud del arrepentimiento. Kylian Mbappé vio la roja en Mendizorroza por una durísima patada al exmadridista Antonio Blanco y desde el mismo vestuario quiso pedir perdón. Lo hizo en persona con el futbolista alavesista, al que fue a ver al vestuario babazorro, pero también se mostró apesadumbrado ante sus propios compañeros. Según pudo saber AS, Mbappé se disculpó con ellos por haberles dejado durante sesenta minutos con uno menos en un partido tan áspero. Un cruce de cables en el que no buscó excusas. Vuelve de Vitoria muy molesto consigo mismo.

AS tuvo acceso a la imagen del momento en que Mbappé pidió perdón personalmente a Antonio Blanco por la durísima patada que le costó la expulsión.

Del mal, al menos, el menor. El club blanco respira con cierto alivio porque se espera para el 9 madridista una sanción máxima de tres partidos, lo que no le impedirá jugar el 26 de abril la final de Copa contra el Barcelona. Estará en La Cartuja. Tampoco se quiere hacer sangre con Mbappé porque se considera, de manera interna, que el galo venía “muy caliente” por dos golpes que le habían propinado Mouriño y Abqar. No se le exculpa, ni mucho menos, pero sí se le entiende. El primero fue el propio Blanco, que aceptó de buen grado las disculpas y la mano que le tendió Mbappé en las entradas del estadio babazorro, como evidencia la imagen a la que tuvo acceso este periódico. “Fue una entrada fuerte, he hablado con Kylian, se ha disculpado y no hay ningún problema, son acciones que pueden pasar en el fútbol”, diría después el propio Blanco en zona mixta.

Es la primera roja que Ve Mbappé desde 2019, cuando le ocurrió contra el Rennes con el PSG. Pese a lo visto en Mendizorroza, donde ni siquiera protestó la expulsión consciente de que el gravísimo error había sido únicamente suyo, no es un futbolista que sufra estos cortocircuitos de manera recurrente. Esta temporada apenas ha visto cuatro amarillas y la pasada, la última en el PSG, únicamente cinco.

Mbappé no protestó la decisión de Soto Grado, que tras consultar el VAR mostró la roja al francés.ANDER GILLENEA
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Las repercusiones desde ahora pasan a Competición. Al no provocar una lesión, Blanco pudo seguir jugando, se le aplicará el artículo 130: entre uno y tres partidos. Tendrían que caerle cuatro o más para perderse la final de Copa. Por los precedentes, todo apunta a dos.

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