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Habrá criba con las renovaciones

Con viento a favor todo fluye de una manera mucho más fácil. También las renovaciones. Sucedió la temporada pasada con las de Modric (39 años, 40 en septiembre) y Lucas Vázquez (33). Todo, teniendo en cuenta la política que sigue el Madrid de prolongar sólo temporada a temporada a los jugadores que superan claramente la treintena. Eso es justo lo que sucedió con ellos. Y ahora que vuelven a venir mal dadas, esas dos renovaciones, las primeras que debe afrontar el Madrid nada más terminar la temporada, corren serio peligro. Esas y otra más, la de David Alaba (32), que termina contrato en 2026, aunque esta se tratará unos meses después. Los tres, Lucas, Modric y Alaba, tienen bastante difícil seguir en el Madrid. Rüdiger, también con 32 años, mantiene opciones de continuar.
Modric (39) y Lucas Vázquez (33) terminan este verano y tienen difícil la prolongación. Alaba (32), que acaba en 2026, está en el mismo caso. El club planea un nuevo impulso con los fichajes de Alexander Arnold, un central y un mediocentro.
Con viento a favor todo fluye de una manera mucho más fácil. También las renovaciones. Sucedió la temporada pasada con las de Modric (39 años, 40 en septiembre) y Lucas Vázquez (33). Todo, teniendo en cuenta la política que sigue el Madrid de prolongar sólo temporada a temporada a los jugadores que superan claramente la treintena. Eso es justo lo que sucedió con ellos. Y ahora que vuelven a venir mal dadas, esas dos renovaciones, las primeras que debe afrontar el Madrid nada más terminar la temporada, corren serio peligro. Esas y otra más, la de David Alaba (32), que termina contrato en 2026, aunque esta se tratará unos meses después. Los tres, Lucas, Modric y Alaba, tienen bastante difícil seguir en el Madrid. Rüdiger, también con 32 años, mantiene opciones de continuar.
En los planes del Madrid ahora está tomar un nuevo impulso con los futbolistas que han de llegar. El primero, Alexander Arnold para el lateral derecho. Todo está acordado a falta de la firma cuando termine la temporada. Llega con la carta de libertad bajo el brazo. De su fichaje, es Lucas Vázquez el principal damnificado. Porque junto a Alexander Arnold estará Carvajal, ya recuperado.
Tras el inglés del Liverpool, el Madrid busca comprar un central joven y de futuro (Huijsen es uno de los que está en la agenda, pero tiene un coste de 60 millones de euros), y un mediocentro. En este caso, uno de los mejor colocado es Zubimendi, de la Real, aunque el Arsenal tiene muy adelantadas las negociaciones para incorporarlo. Su cláusula también es de 60 millones de euros. Es evidente que el donostiarra o cualquier otro medio que venga, complica la continuidad de Modric, cuya trayectoria en el Madrid se da por sobradamente amortizada.
Alaba y Rüdiger, patatas calientes.
Los casos que tienen más aristas por decidir aún desde el club blanco son los de Alaba y Rüdiger, aunque de ellos es el austríaco el que pinta peor. Ancelotti le tiene mucho respeto, siempre ha sido un futbolista fetiche para él y le ha ido recuperando poco a poco después de que reapareciera tras más de año lesionado por su rotura de cruzado. Sus últimas dos apariciones, ambas en el lateral, primero ante el Valencia y luego frente al Arsenal, en las que hizo aguas, han aportado las certezas que la cúpula necesitaba para empezar a pensar en renovar la demarcación de central.
Ahí, Rüdiger sí tiene sitio en la plantilla de los próximos años junto Militao (la esperanza es que esté plenamente recuperado de su nueva lesión de cruzado este verano), que sólo tiene 27 años, de Asencio y del central que está por venir (probablemente, Huijsen). Rüdiger, que juega de manera continuada con dolores en una rodilla en la que hace unos años también sufrió una lesión de gravedad, esta temporada sí está teniendo protagonismo. Es el tercer jugador con más minutos en la plantilla sólo por detrás de Valverde y Mbappé. Además, se ha significado en los últimos tiempos como un jugador que resuelve en los momentos decisivos por su garra. Pasó con el último penalti que metió en la pasada Champions en el Etihad, o en esta ante el Atlético. O su tanto ante la Real en Copa. Y antes de eso, cuando se partió la cara para salvar un punto en Champions ante el Shakhtar.
Hay otro factor que facilita la no renovación de Alaba, y es el sueldo que cobra el austríaco, uno de los más altos de la plantilla: supera los 10 millones de euros, como quedó demostrado en los documentos de Football Leaks que fueron publicados por Der Spiegel. Los sueldos de Modric y Lucas, en cambio, no son tanto problema. El croata ha venido renovando a la baja, año tras año, en las últimas temporadas. Lo ha hecho porque persigue un sueño. Jugar en el Madrid a los 40 y afianzarse como el jugador en la historia de la entidad con más títulos: ya lo es, con 28, por delante de Carvajal (27) y Nacho (26). “Ahora mismo no pienso en la retirada”, dijo el croata en Telefoot hace sólo unos días. “Pero como siempre he dicho: me gustaríaretirarme en el Madrid. Sería un sueño para mí. Vamos a ver qué pasa”. Pues pasa que con viento a favor, todo fluye más fácil. Y en estos momentos comienza a dar de cara.
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