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Burgui: “Ancelotti debe seguir en el Madrid, pase lo que pase”
Ancelotti hizo debutar a Jorge Franco Alviz (Burguillos del Cerro, 1993), a Burgui, en un amistoso en Varsovia contra la Fiorentina en agosto de 2014. Extremo alto y habilidoso, formado en la calle y en el fútbol sala, el Madrid apostó por él cuando tenía 18 años y también lo pretendían City, Liverpool y Tottenham. El Alavés lo fichó en 2017. Una bacteria le apartó del fútbol demasiado joven. Regresó al origen, a su pueblo, al refugio en el que nació su idilio con el balón.
El canterano del Madrid, que debutó con el primer equipo a las órdenes de Ancelotti, pasó luego por Vitoria antes de retirarse demasiado temprano por una bacteria en la rodilla.
Ancelotti hizo debutar a Jorge Franco Alviz (Burguillos del Cerro, 1993), a Burgui, en un amistoso en Varsovia contra la Fiorentina en agosto de 2014. Extremo alto y habilidoso, formado en la calle y en el fútbol sala, el Madrid apostó por él cuando tenía 18 años y también lo pretendían City, Liverpool y Tottenham. El Alavés lo fichó en 2017. Una bacteria le apartó del fútbol demasiado joven. Regresó al origen, a su pueblo, al refugio en el que nació su idilio con el balón.
¿Ha recuperado la ilusión?
Sí. Soy feliz de nuevo. Es otra felicidad, distinta a cuando jugaba en la élite, pero estoy muy bien. La última etapa de jugador me hizo sufrir mucho con la rodilla. Tenía dolores insoportables. Me molestaba incluso al toser y al estornudar. No podía seguir así. Fue por una bacteria que se comió casi todo el cartílago de la rodilla derecha. Me tuvieron que operar dos veces. Me dijeron que si quería llevar una vida normal tenía que dejar el fútbol, con 28 años.
¿Sufrió en silencio?
Lloré mucho de rabia, de impotencia y de dolor. No quería que me vieran ni mis padres. No quise saber nada del fútbol durante unos meses. Soy un forofo y puedo estar viendo fútbol a todas horas, pero me sentía tan destrozado que me aparté durante un tiempo. Me costó, pero entre familia, amigos y ayuda psicológica, lo superé.
Ahora es presidente y entrenador de un club de fútbol sala.
Hemos creado un buen equipo en mi pueblo, va muy bien, todos estamos muy involucrados y me encanta lo que hago.
Se entrenó con Zidane, Ancelotti y Mourinho.
Cada uno tiene su estilo. Mourinho exigía mucho, te llevaba al límite para sacarte lo mejor. Ancelotti es mucho más tranquilo y Zidane me marcó mucho. Me trató como a un hijo, me animaba, me daba consejos y se quedaba conmigo para hacer finalizaciones y que mejorase. Se portó muy bien conmigo.
¿Cómo se movía usted entre tantas estrellas?
Al principio me costó, era tímido. Un día Mourinho hizo un corro y me hizo pasar mucha vergüenza. Dijo que llevaba dos meses en el equipo y todavía no sabía cómo hablaba. Me hizo decir unas palabras, los compañeros me hicieron un pasillo y a partir de ahí mi integración mejoró mucho.
Al salir del Madrid eligió al Alavés antes que al Betis…
Fue una decisión meditada. Mi pueblo está cerca de Sevilla y pensé que tendría visitas continuas de familiares y amigos y que tal vez no iba a estar 100% centrado en el fútbol. Ir a Vitoria fue una buena elección. Me convenció el proyecto, tenía amigos allí y no tuve dudas.
Como futuro entrenador, ¿qué diagnóstico hace del momento del Real Madrid?
Sufre mucho defensivamente. Se parte demasiado en algunos momentos. Las bajas se notan, pero falta solidez. El golpe en Londres fue durísimo. Nadie esperaba algo así.
Ya se habla de remontada…
En el Bernabéu todo es posible. De todas formas, me entusiasmó el Arsenal. Es un equipo muy bien trabajado, bueno defensivamente y tiene una idea muy clara de lo que quiere. El público apretará, pero va a ser una misión muy complicada.
Antes toca el Alavés, que ha perdido un partido de cinco…
En Vitoria sufren todos y el Madrid no va a ser una excepción. Lo va a tener muy difícil. Además, las tendencias de uno y otro son muy distintas.
¿Ancelotti debe seguir?
En mi opinión sí, pase lo que pase. Veremos cómo termina la temporada, pero es un técnico que se ha ganado la confianza. Aunque en el Madrid un año malo no lo soporta cualquiera, Ancelotti le ha dado mucho al club. Incluso sin ganar ningún gran título, debería continuar.
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