Baloncesto
Así es el París del caos, el rival del Madrid en el play in
El París Basketball será el rival del Real Madrid el próximo martes en el play in, a un solo duelo en el Movistar Arena (21:00 horas, Movistar+). Quien gané atrapará la séptima plaza y se cruzará en el playoff con desventaja de cancha con el Fenerbahçe (2-2-1). Quien pierda tendrá otra oportunidad el viernes en casa frente al vencedor del Bayern Múnich-Estrella Roja y el que salga triunfador concluirá octavo y se medirá con el líder, el Olympiacos.
El joven club francés llegó a liderar la Euroliga y vuelve a estar al alza. Hace dos semanas puso a los blancos contra las cuerdas con un estilo enloquecido. “TJ Shorts se come a quien sea”.
El París Basketball será el rival del Real Madrid el próximo martes en el play in, a un solo duelo en el Movistar Arena (21:00 horas, Movistar+). Quien gané atrapará la séptima plaza y se cruzará en el playoff con desventaja de cancha con el Fenerbahçe (2-2-1). Quien pierda tendrá otra oportunidad el viernes en casa frente al vencedor del Bayern Múnich-Estrella Roja y el que salga triunfador concluirá octavo y se medirá con el líder, el Olympiacos.
Una eliminatoria crucial de play in que vive su segunda edición, tras copiar el modelo de la NBA, y en la que el equipo blanco se estrena. Y lo hará ante uno de los rivales más complicados con el que se puede topar a un solo encuentro y que, además, anda en racha. La prueba está muy próxima, el pasado 3 de abril, en la penúltima jornada, cuando el Madrid superó en uno de los choques más espectacularesde la temporadaal equipo francés. El baloncesto de ambos estuvo a la altura del resultado, del monumental 105-104. Con los de Tiago Splitter anotando 15 de sus primeros 23 triples (65%) para afrontar con ventaja el último cuarto y llevar al límite a un gran Real. Un triunfo agónico frente a los diablos parisinos: TJ Shorts, Nadir Hifi, Tyson Ward… Un bloque con una propuesta muy atractiva de juego que busca sembrar el caos, confundir con su defensa y aprovechar cada situación de ventaja con velocidad y atrevimiento, con ritmo altísimo y posesiones cortas si hay opción de un buen tiro. O, en el polo opuesto, con el bote y la capacidad de generar ventajas del eléctrico TJ Shorts, que con su 1,75 m escasos es el exterior más desequilibrante de la Euroliga, o uno de ellos.
“Splitter ha hecho un trabajazo”
El París Basketball se ha movido con rachas durante el curso, pero ahora vuelve a surfear sobre una ola buena tras ganar al Alba, al Panathinaikos en el OAKA y al Armani Milán, y llevar al límite fuera de casa al Madrid y al Fenerbahçe (101-100). Comenzó pagando la inexperiencia del debutante con tres derrotas en los cuatro primeros partidos, aunque el triunfo ante el PAO fue una fiesta en el París Bercy. Luego apiló diez victorias consecutivas y se puso líder hasta diciembre, cuando un virus mermó a la plantilla, de hecho Shorts fue baja en la ida contra el Madrid (85-96). Cinco derrotas encadenadas. Tocaba rehacerse y lo ha hecho. Llega a punto para hacer historia en el año de su debut en la máxima competición, a la que ha entrado para quedarse. “Saben jugar en equipo, Splitter ha sabido transmitir la ilusión de un equipo novato que no tiene nada que perder y que juega unido. Ha hecho un trabajazo”, dice de su rival Chus Mateo.
TJ Shorts es la gran estrella (18,7 puntos, 7,5 asistencias para 23,1 de valoración), solo Vezenkov valora más en la Euroliga; pero hay varios jugadores muy importantes. El imprevisible cañonero Nadir Hifi (14,7 tantos); el alero Tyson Ward, un gran agitador (10,9 y 5 rebotes); otro alero estadounidense, Collin Malcolm (8); el escolta chileno Sebastián Herrera, que se ha hecho un hueco en las últimas jornadas con su trabajo y tiro de tres; el ala-pívot finlandés Mikael Jantunen (40% en triples y 4,7 rebotes) y, por dentro, el atlético Kevarrius Hayes (6,4 y 4,5 rechaces), en labor sorda. El París es un equipo fuerte al rebote, pero por dentro es muy inferior a un Madrid con Tavares, Ibaka, Garuba, Fernando… y tendrá que recurrir a la movilidad y las trampas defensivas para tratar de compensar una batalla que en el cara a cara no puede ganar. La mala noticia para Splitter es que el base-escolta alemán Maodo Lo, que les metió a los merengues 30 puntos en la ida, está lesionado y no sabemos si jugará. Daulton Hommes es baja.
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Mohammed BadraEFE
Un club joven y ambicioso
El nacimiento del París Basketball en 2018 coincide con la entrada en escena de David Kahn, actual presidente, periodista y antiguo ejecutivo de la NBA, que arriesgó para hacer realidad algo que a muchos les parecía imposible, que París no tuviera un gran equipo de baloncesto. Momentos clave en la corta vida de la entidad hay varios, pero uno muy relevante se produjo en el verano de 2023.
El club apostó por el finlandés Tuomas Iisalo para el banquillo (ahora al frente de Memphis Grizzlies). Acababa de ganar la Champions FIBA en Málaga con el Telekom Bonn. Con él, de ese equipo campeón, llegaron seis jugadores. El viaje de Bonn a París lo afrontaron TJ Shorts, Collin Malcolm, Tyson Ward, Michael Kessens, Leon Kratzer y Sebastián Herrera.
En 2024 ganaron la Eurocup y ahora, con un presupuesto al alza que ronda los 20 millones, aspiran al playoff e, incluso, a la Final Four. Iisalo se marchó de asistente a los Grizzlies y acaba de ascender. Lo sustituyó Tiago Splitter, camino inverso el del brasileño, de la NBA a Francia, donde uno de sus ayudantes es el español Carles Marco y otro, Stefan Ivanovic, el hijo de Dusko.
“Shorts se come a quien sea”
Sebastián Herrera habló con AS el pasado diciembre para hablar de la formación de un equipo que quiere seguir haciendo historia: “Iisalo nos dio el hábito de cómo trabajar, la base, y con Splitter nos hemos acoplado a lo nuevo, aunque mantenemos cosas parecidas, un estilo. La temporada en Bonn fue increíble, éramos jugadores bastante sólidos pero no habíamos ganado ningún campeonato, queríamos dar el paso al siguiente nivel y se armó un tremendo grupo. Lograr la Champions (FIBA) fue algo inesperado y nos dio la mentalidad de salir a vencer en todos los partidos, independientemente del oponente. Eso nos permitió dar el siguiente paso en París, con la Eurocup y una subida de nivel”.
Un trasvase de seis jugadores que se realizó en aquel verano de 2023, una fecha señalada. “Empezamos a escuchar cosas y hablamos entre nosotros, ya que somos un grupo muy unido, y resultó lindo que llegáramos a París varios jugadores a la vez”, recordaba Sebastián Herrera.
El objetivo no solo era ganar, sino enganchar a una afición nueva en el recién estrenado Adidas Arena, con capacidad para 8.000 espectadores (algunos partidos se han jugado en un París Bercy con más aforo). “Con las victorias y un basket atractivo, la gente se ha motivado. Hay una mezcla entre lo americano, también con los espectáculos en la cancha, y lo europeo. Un ambiente difícil de explicar, un poco distinto al habitual en Europa, pero con su esencia, con los fans apoyando todo el partido, porque empujan más de lo que muchos esperaban, incluso yo mismo no imaginaba tanto. Gran ambiente y cancha llena. Es bonito ver cómo una ciudad tan grande empieza a respaldarnos”.
“Sembrar el caos”
Ese baloncesto sugerente del que habla Herrera es de “un estilo intenso, de esfuerzo colectivo”. “Lo damos todo y tratamos de crear el caos en el rival, mientras que en ataque jugamos muy libres. Resulta difícil de explicar, yo conozco el sistema, llevo varios años y me siento cómodo, pero a los chicos nuevos les cuesta un poco las primeras semanas, luego se acostumbran y lo disfrutan”.
En esa estructura encaja gente descarada y agitadora, incluso incendiaria, como el escolta Nadir Hifi. “Sí, me recuerda un poco a Sergio Llull, a un Llull joven”, afirma Seba. Aunque si se trata de sembrar el caos, pocos mejores que el alero estadounidense Tyson Ward: “Está en todas, puede defender a cualquiera y luego sale al contraataque y hace un mate, se juega un triple… El caos completo”.
Y, claro, por ahí anda TJ Shorts (Timothy Neocartes Shorts II, pasaporte de Macedonia del Norte), al que se le ve bajito (1,75 m y 27 años) y es un demonio. Al oponente le resulta imposible intuir lo que se le viene encima. MVP de la Champions y de la Final Four, MVP de la Eurocup y de la final y candidato al mismo reconocimiento en esta Euroliga, lo que sería un tres de tres encadenado: “Tiene una mentalidad increíble, se come a quien sea que esté enfrente. Su talento es innato, pero su corazón es aún más grande. No le teme a nadie, una combinación de muchas cosas que lo hacen muy especial”.
El duelo de Shorts con Campazzo (y con Andrés Feliz) es uno de los más explosivos que se puede ver en la Euroliga: “Me enfrenté al Facu y a Deck en febrero de 2024, cuando Chile ganó a Argentina 69 años después en un partidazo que no se esperaba nadie. Tanto Campazzo como Shorts son muy intensos y competitivos, con una enorme mentalidad ganadora. Pero aquí no se juega un uno contra uno, sino un encuentro entre dos colectivos muy importantes”.
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