
Aquaman nunca fue el personaje más popular entre los fans de DC Cómics, pero es una realidad que la película dedicada al superhéroe marino en la que Jason Momoa se metía en la piel de Arthur Curry fue un auténtico éxito en su paso por las salas de cine. Estrenada en diciembre de 2018 bajo la batuta de James Wan y coprotagonizada, además de Momoa, por Amber Heard, Willem Dafoe, Patrick Wilson y Nicole Kidman, entre otros, Aquaman recaudó 1.148 millones de dólares, la película más taquillera de la historia de DC.
Tras la buena acogida de Aquaman, los planes para una secuela no tardarían mucho en ponerse en marcha, aunque finalmente la producción de la película acabó viéndose afectada por diversos retrasos. Una vez rodada tuvieron que regrabarse algunas escenas y la presencia de algunos actores se vio reducida, pero el Aquaman y el reino perdido estuvo lista para su estreno en diciembre de 2023, exactamente 5 años después.
Aquaman 2 también estaba dirigida por Wan y protagonizada por Momoa, pero no pudo replicar el éxito de su predecesora. Finalmente la cinta recaudaría 439 millones de dólares, que es bastante más de lo que había recaudado algunas de las películas del Universo Cinematográfico de DC inmediatamente anteriores, pero se quedó muy lejos de la primera película.
Además, el largometraje había costado mucho más dinero, 215 millones de dólares, y la recepción por parte de la crítica fue tajante en que no era una buena película. Una forma poco halagüeña -tiene un 33% de críticas favorables según Rotten Tomatoes– para despedirse de una etapa en la franquicia antes de que James Gunn y Peter Safran se pusieran a los mandos para reformularlo todo.
No obstante, aunque Aquaman y el reino de hielo no funcionó demasiado bien, la película ha sido recibida con los brazos abiertos en su reciente llegada al catálogo de Netflix en España, donde rápidamente se ha apoderado del segundo puesto de lo más popular.
En esta segunda entrega dedicada al héroe de DC, Black Manta (Yahya Abdul-Mateen II) continúa lamiéndose las heridas después de su primer intento de matar a Aquaman (Momoa). Sin embargo, ésta parece haber sido sólo una batalla perdida en una guerra mucho más grande, porque Black Manta todavía está obsesionado con vengar la muerte de su padre y esta vez está seguro de que puede derrotar a Aquaman. Con el misterioso tridente negro en su mano, posee un poder increíble y Aquaman también es consciente de ello. Para poder enfrentarse a Black Manta, el protagonista se pone en contacto nuevamente con el antiguo rey de Atlantis, su hermano Orm (Patrick Wilson), con quien debe superar sus más y sus menos para rápidamente para trabajar en equipo y así poder proteger a los habitantes del Reino.
«Abusa del CGI hasta un punto en el que afecta a su estético y puede distraer al espectador», advertía Alejandro G. Calvo en su crítica de 2,5/5 estrellas. «Los personajes no están bien desarrollados y la trama se queda floja. Hay, que verla sabiendo qué tipo de producto es y aceptando que no aporta mucho al género de superhéroes».