Connect with us

Food And Travel

Ni hervir las patatas ni freírlas sin aceite: cómo preparar una tortilla de patatas prebiótica y con menos calorías

Published

on

Si hay algo que une a toda España, es la tortilla de patata, es nuestra joya de la corona, independientemente de que luego siempre surja el debate infinito de si debe llevar cebolla o no y de si está más buena estando menos hecha o más cuajada.

Sin embargo, la forma tradicional de hacerla conlleva una gran cantidad de aceite de oliva para freír los ingredientes, lo que hace que este plato sea muy calórico y contenga bastante grasa. Por eso, para aquellos que quieren cuidarse, existe una alternativa mucho más ligera y beneficiosa para la salud intestinal: asar las patatas con su piel y dejarlas enfriar antes de usarlas para la tortilla.

Los prebióticos en esta tortilla de patata

Al llevar a cabo este cocinado de la patata y al dejar que se enfríen, parte de su almidón se transforma en uno resistente, siendo este un tipo de fibra que el cuerpo no va a digerir, pero que va a alimentar a las bacterias beneficiosas del intestino, en especial a las Bifidobacterium y Lactobacillus.

Así, este tipo de fibra va fermentando y genera compuestos que son muy buenos para la salud digestiva como el butirato, que ayuda a mantener la mucosa intestinal en perfecto estado y además tiene efectos antiinflamatorios.

De esta forma, la tortilla de patata se convierte en un prebiótico, favoreciendo una mejor digestión y reduciendo los picos de glucosa en sangre que son perjudiciales, sobre todo para las personas con diabetes tipo 2.

Tortilla de patata prebiótica

Ingredientes

  • 4 patatas medianas
  • 1 cebolla (opcional)
  • 5 huevos
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra

Paso a paso para hacer esta tortilla

  1. Para empezar, lavamos muy bien con agua las patatas y las metemos en la freidora de aire o el horno precalentado a 200°C. Las cocinamos durante unos 40-45 minutos, hasta que veamos que están tiernas.
  2. Después, hay que sacarlas con cuidado de no quemarnos y dejar que las patatas se enfríen a temperatura ambiente. Luego las metemos en el frigorífico mínimo 6 horas. Este paso es imprescindible para que se pueda generar el almidón resistente.
  3. Pasado este tiempo, pelamos las patatas frías y las cortamos como más nos guste. También picamos la cebolla en juliana o en trozos pequeños.
  4. Ahora, en una sartén grande, calentamos un chorrito de aceite de oliva virgen extra y pochamos la cebolla a fuego medio hasta que esté dorada y blanda.
  5. Incorporamos las patatas a la sartén y las salteamos con la cebolla, añadiendo una pizca de sal y dejando que los sabores se integren entre sí.
  6. Mientras, en un recipiente, batimos los huevos con sal y después echamos ahí las patatas y cebolla, removiendo bien para que se absorba el huevo.
  7. Por último, calentamos un chorrito de aceite en la sartén y vertemos la mezcla de la tortilla. Cocinamos por ambas caras el tiempo que queramos para conseguir el resultado ideal para cada persona, emplatamos, ¡y a disfrutar de esta tortilla de patata llena de beneficios!

Propiedades y beneficios de la patata

Las patatas son un súper alimento que están, prácticamente, en todas las despensas del mundo. Son ricas en carbohidratos complejos, que aportan una energía que se mantiene en el tiempo y ayudan así a evitar los picos de azúcar en sangre.

También son una fuente de fibra, sobre todo si se consume con la piel, ayudando así a mantener una buena salud digestiva y evitando el estreñimiento. Contienen vitamina C, que es un antioxidante esencial que refuerza el sistema inmunológico, vitaminas del grupo A y B, como la B1, B3 y ácido fólico, que son clave para el buen funcionamiento del cerebro.

Otro de sus grandes beneficios es su alto contenido en potasio, un mineral fundamental en el organismo que mejora la función de los nervios, la contracción de los músculos y nos ayuda a mantener el ritmo cardíaco constante.

Por cada 100 gramos la patata contiene:

  • Calorías: 87 kcal
  • Proteínas: 2,0 gr
  • Grasas totales: 0 gr
  • Hidratos de carbono: 20 gr
  • Fibra: 2,1 gr
  • Potasio: 328 mg

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las mejores novedades para disfrutar al máximo del placer de comer.

​El truco está en asarlas con la piel y dejarlas enfríar unas cuantas horas antes de pelarlas para utilizarlas en la tortilla. Esto, genera un tipo de fibra que es beneficiosa para la salud intestinal.  Recetas 

Continue Reading
Advertisement