Tenis
Djokovic resiste en el nuevo tenis
El tenis llega a Montecarlo, el primer gran desafío sobre tierra, el tercer Masters 1.000 de la temporada. Los dos primeros, Indian Wells y Miami, ambos en pista dura, se resolvieron con desenlaces sorprendentes. Ni en cien respuestas hubiéramos acertado la quiniela. El Sunshine Double deparó dos nuevos maestros: Jack Draper en California y Jakub Mensik en Florida. El tiempo dirá si han sido destellos ocasionales o su presentación en las alturas. No descarten ninguna opción, aunque hay detalles que empujan a pensar que han venido para quedarse. Draper, que batió a Carlos Alcaraz, ya había sido semifinalista en el US Open. Y Mensik, que tumbó a Novak Djokovic, presenta la prometedora frescura de sus 19 años. Los dos aprovecharon también las dimisiones de las principales raquetas. Jannik Sinner, el número uno, cumple sanción por dopaje. Y las alternativas a su trono, Alexander Zverev, Daniil Medvedev y el propio Alcaraz, no han ofrecido un buen tono.
Llega la campaña de tierra con Montecarlo y al serbio se le resiste el título 100 a sus 37 años y con el final de su carrera más cerca.
El tenis llega a Montecarlo, el primer gran desafío sobre tierra, el tercer Masters 1.000 de la temporada. Los dos primeros, Indian Wells y Miami, ambos en pista dura, se resolvieron con desenlaces sorprendentes. Ni en cien respuestas hubiéramos acertado la quiniela. El Sunshine Double deparó dos nuevos maestros: Jack Draper en California y Jakub Mensik en Florida. El tiempo dirá si han sido destellos ocasionales o su presentación en las alturas. No descarten ninguna opción, aunque hay detalles que empujan a pensar que han venido para quedarse. Draper, que batió a Carlos Alcaraz, ya había sido semifinalista en el US Open. Y Mensik, que tumbó a Novak Djokovic, presenta la prometedora frescura de sus 19 años. Los dos aprovecharon también las dimisiones de las principales raquetas. Jannik Sinner, el número uno, cumple sanción por dopaje. Y las alternativas a su trono, Alexander Zverev, Daniil Medvedev y el propio Alcaraz, no han ofrecido un buen tono.
