Val Kilmer, mítica estrella de Hollywood que llevaba 40 años brindado su talento a la industria, ha fallecido a los 65 años de edad. La muerte del actor ha tenido lugar este martes 1 de abril de 2025 en Los Angeles, California, tal y como ha confirmado su hija, Mercedes Kilmer. La noticia ha sido recibida con tristeza y pesar por el mundo del cine y por sus fans y admiradores en todo el mundo.
El último trabajo delante de las cámaras de Kilmer había sido en 2022 en la película Top Gun: Maverick, la esperada secuela de la cinta de acción de los años 80 Top Gun que siempre se sitúa como uno de sus trabajos más míticos. A lo largo de sus cuatro décadas de carrera, Kilmer nunca fue nominado al Oscar, pero fue uno de los mejores y más prometedores de su generación y en su trayectoria destacan famosas películas como Willow, The Doors, Tombstone (La leyenda de Wyatt Earp), Amor a quemarropa, Heato, por supuesto, Batman Forever de Joel Schumacher.
Sin embargo, aunque su papel como el Caballero Oscuro en la gran pantalla es uno de sus papeles más recordados, Kilmer no escondió que había sido una de sus peores experiencias como actor.
Val Kilmer fue elegido como el nuevo Bruce Wayne cuando Michael Keaton, que había interpretado al personaje en las películas anteriores Batman y Batman Vuelve, de Tim Burton, decidió no seguir encarnando al héroe de Gotham. Fue el propio Schumacher, que recogió el testigo de Burton, quien se fijó en él para el papel y Kilmer, que había visitado los estudios de la mítica serie de los 60 y recientemente había visitado una cueva de murciélagos, interpretó las coincidencias como una señal y aceptó sin siquiera leer el guion.
Sobre su experiencia en Batman Forever habló en el documental autobiográfico Val, lanzado en 2021 en Prime Video:
Cualquier emoción que sentía de niño se vio aplastada por la realidad del Batitraje. Sí, todos los niños quieren ser Batman. Quieren ser él de verdad… no necesariamente interpretarlo en una película
Para Kilmer, el gran problema con la película fue el traje, que hizo que la experiencia fuese realmente incómoda y acabase afectando por completo al rodaje y a sus relaciones con sus compañeros: «No podía oír nada y después la gente dejó de hablarme». «Creo que no importaba lo que estuviera haciendo. Intenté ser como un actor de telenovela. Cuando me giraba hacia Nicole… no podía contar las veces que ponía las manos en las caderas».
Así, aquella experiencia no jugó un buen papel para mejorar la reputación que tenía Kilmer de ser un actor un poco difícil, siendo el propio Schumacher uno de los que criticó su comportamiento.
A pesar de no ser una gran experiencia para Kilmer, Batman Forever fue un éxito comercial. Con 336 millones de recaudación fue una de las películas más taquilleras de 1995, pero la acogida no fue tan buena como la de las películas anteriores, considerándose que no estuvo a la altura.
