Mundo Motor
Toyota Crown: Ni sedán ni SUV, el híbrido que está dando de qué hablar

Cuando uno piensa en un sedán, ciertas imágenes vienen a la mente: líneas elegantes, una postura baja, comodidad para viajes largos. Por otro lado, un SUV evoca robustez, una posición de manejo elevada y versatilidad. ¿Pero qué pasa si tomamos elementos de ambos mundos? Justo ahí es donde entra en escena el Toyota Crown, un vehículo que desafía las clasificaciones tradicionales y propone algo genuinamente distinto en el panorama automotriz actual.
Lo primero que salta a la vista, y lo que verdaderamente distingue al Crown, es su concepto único. No es simplemente un sedán; tampoco es un crossover al uso. Es una fusión pensada, una especie de “sedán elevado”.
Toda su silueta conserva la elegancia de un coupé, con una línea de techo que cae suavemente hacia la parte trasera, pero su carrocería se asienta notablemente más alta que la de un sedán convencional. Esta mayor altura (unos 154 cm, para ser precisos) no solo le otorga una presencia imponente en el camino, sino que también facilita algo tan cotidiano como entrar y salir del auto, elevando el punto de la cadera del ocupante a unos 63.5 cm del suelo. Es un detalle que se agradece en el día a día.
Esta peculiar combinación es lo que lo hace especial. Antes de sumergirnos en la tecnología o los motores, vale la pena detenerse en esta filosofía de diseño. Es como si Toyota quisiera ofrecer lo mejor de dos mundos: la sofisticación y el manejo aplomado asociados a un buen sedán, junto con la visibilidad y la facilidad de acceso que muchos buscan en un SUV.
Y lo logra con un diseño audaz, protagonizado por el distintivo frontal «Hammerhead» de Toyota y unas líneas de carácter fluidas que recorren su carrocería, montada sobre ruedas de 19 o hasta 21 pulgadas que refuerzan esa postura elevada.

Es un híbrido: Eficiencia o potencia
Ahora sí, hablemos de lo que impulsa a esta propuesta tan particular. Fiel a la estrategia de electrificación de Toyota, el Crown se ofrece exclusivamente con motorizaciones híbridas, pero aquí también encontramos opciones para diferentes gustos. Están disponibles dos sistemas distintos: el Toyota Hybrid System (THS) y el más potente Hybrid Max.
Para las versiones XLE, Limited y Nightshade, se reserva el conocido y muy eficiente Toyota Hybrid System (THS). Este sistema combina un motor de gasolina de 2.5 litros con motores eléctricos en ambos ejes (otorgándole tracción integral electrónica bajo demanda), priorizando el bajo consumo. Hablamos de una eficiencia estimada combinada de unas 41 millas por galón (aproximadamente 17 km/l), lo cual es francamente bueno para un auto de su tamaño y características. Este sistema utiliza una batería de níquel-metal hidruro y está pensado para ofrecer una aceleración suave y una conducción placentera y económica.
Por otro lado, si lo que se busca es una experiencia más vigorosa, la versión Platinum viene equipada de serie con el sistema Hybrid Max. Este es el híbrido de alto rendimiento de Toyota. Aquí, un motor turboalimentado de 2.4 litros se asocia con motores eléctricos más potentes (también con tracción total, pero en este caso electrónica y permanente) y una transmisión automática de seis velocidades con cambio directo.
Aquí el resultado es una potencia combinada de 340 hp y un impresionante par motor de 400 libras-pie, disponible desde bajas revoluciones. Esto se traduce en una respuesta mucho más deportiva y enérgica, aunque, como es lógico, el consumo es un poco mayor, con una estimación combinada de 30 MPG (unos 12 km/l).

Toyota Crown: Una conducción confiable y refinada
Uno podría pensar que esa mayor altura comprometería el manejo, pero los ingenieros de Toyota parecen haber trabajado duro para evitarlo. La estructura del Crown utiliza una combinación de materiales ligeros y de alta resistencia, junto con técnicas de soldadura avanzadas y adhesivos estructurales para asegurar la rigidez del chasis. La dirección se siente directa gracias a que la caja de dirección está montada directamente sobre el miembro de la suspensión.
La suspensión en sí es de tipo MacPherson adelante y multibrazo atrás, una configuración probada. Los modelos XLE, Limited y Nightshade utilizan amortiguadores con válvula de oscilación diseñados para un viaje suave. Mientras tanto, la versión Platinum da un paso más allá con una Suspensión Variable Adaptativa (AVS).
Este sistema ajusta continuamente la fuerza de amortiguación en función de las condiciones del camino y el modo de conducción seleccionado (Normal, Eco, Sport, Rear Comfort o Custom), buscando equilibrar la comodidad con la agilidad, especialmente importante para gestionar la potencia del Hybrid MAX.
Igualmente, se han implementado medidas para reducir vibraciones y ruidos, como bujes suaves y amortiguadores dinámicos, buscando esa sensación de cabina tranquila y refinada. Para complementar, el sistema de frenado controlado electrónicamente incluye Asistencia Activa en Curvas (ACA), que ayuda a mitigar el subviraje en ciertas situaciones.

Interior con lujo y tecnología
Al abrir la puerta, el Crown recibe a sus ocupantes con una cabina que aspira a ser premium. Los asientos tapizados en cuero son estándar en todas las versiones, al igual que el volante calefactable. Los asientos delanteros ofrecen ajuste eléctrico de ocho posiciones, calefacción y ventilación (con tres niveles), mientras que los traseros también son calefactables. El espacio es generoso y los materiales se perciben de buena calidad.
El tablero está dominado por dos pantallas grandes: un cuadro de instrumentos digital de 12.3 pulgadas totalmente configurable y una pantalla táctil central, también de 12.3 pulgadas, para el sistema Toyota Audio Multimedia.
Este sistema es compatible con Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos, y permite interactuar mediante comandos de voz naturales diciendo «Hey Toyota». Ofrece conectividad avanzada, actualizaciones Over-the-Air (OTA) y servicios conectados como navegación inteligente, asistente personal, Wi-Fi a bordo y más (algunos requieren suscripción tras el periodo de prueba).
Detalles como el cargador inalámbrico vertical para el móvil, múltiples puertos USB-C distribuidos por la cabina, el climatizador bizona con controles elegantes y el techo panorámico fijo (estándar en Limited, Nightshade y Platinum) contribuyen a esa atmósfera de confort tecnológico.
El sistema de audio JBL de 11 altavoces (estándar excepto en XLE) promete una experiencia sonora de alta fidelidad. Y para el tope de gama Platinum, se reservan exclusividades como el Head-Up Display a color, el volante con ajuste eléctrico de inclinación y profundidad, y un práctico maletero con apertura manos libres.

Toyota Crown: Seguridad como estándar indiscutible
En materia de seguridad, Toyota sigue su filosofía de ofrecer un equipamiento muy completo desde la versión base. Por lo tanto, todos los Crown vienen de serie con el paquete Toyota Safety Sense 3.0. Este arsenal de asistencias incluye el Sistema de Pre-Colisión con Detección de Peatones (y ciclistas/motociclistas), Control de Crucero Adaptativo por Radar de Rango Completo, Alerta de Salida de Carril con Asistencia de Dirección, Asistente de Mantenimiento de Carril, Reconocimiento de Señales de Tráfico, Luces Altas Automáticas y el Asistente de Conducción Proactiva (PDA), que puede aplicar suaves frenadas o ajustes de dirección para mantener distancias o anticiparse a curvas.
Junto a esto, encontramos de serie el Monitor de Punto Ciego, la Alerta de Tráfico Cruzado Trasero y la Alerta de Salida Segura, que advierte si se va a abrir una puerta cuando se acerca un vehículo o ciclista. Las versiones superiores pueden añadir aún más tecnología, como el Monitor de Visión Panorámica (360°), el sistema de estacionamiento avanzado Advanced Park (en Platinum), Asistente para Atascos de Tráfico, Alerta de Tráfico Cruzado Frontal y Asistente de Cambio de Carril. Y no falta el útil Recordatorio de Asiento Trasero.

Una propuesta audaz y bien equipada
Este Toyota Crown se planta en el mercado como una alternativa interesante para quien busca algo más que un sedán tradicional, pero quizás no necesita o no desea un SUV completo.
Todo su diseño elevado y distintivo es su carta de presentación, pero bajo esa piel encontramos una base tecnológica sólida, dos opciones híbridas bien diferenciadas (una eficiente, otra potente), un interior confortable y lujoso, y un nivel de seguridad muy elevado desde el modelo de entrada.
Cuando uno piensa en un sedán, ciertas imágenes vienen a la mente: líneas elegantes, una postura baja, comodidad para viajes largos. Por otro lado, un SUV evoca robustez, una posición de manejo elevada y versatilidad. ¿Pero qué pasa si tomamos elementos de ambos mundos? Justo ahí es donde entra en escena el Toyota Crown, un vehículo que desafía las clasificaciones tradicionales y propone algo genuinamente distinto en el panorama automotriz actual.
Lo primero que salta a la vista, y lo que verdaderamente distingue al Crown, es su concepto único. No es simplemente un sedán; tampoco es un crossover al uso. Es una fusión pensada, una especie de “sedán elevado”.
Toda su silueta conserva la elegancia de un coupé, con una línea de techo que cae suavemente hacia la parte trasera, pero su carrocería se asienta notablemente más alta que la de un sedán convencional. Esta mayor altura (unos 154 cm, para ser precisos) no solo le otorga una presencia imponente en el camino, sino que también facilita algo tan cotidiano como entrar y salir del auto, elevando el punto de la cadera del ocupante a unos 63.5 cm del suelo. Es un detalle que se agradece en el día a día.
Esta peculiar combinación es lo que lo hace especial. Antes de sumergirnos en la tecnología o los motores, vale la pena detenerse en esta filosofía de diseño. Es como si Toyota quisiera ofrecer lo mejor de dos mundos: la sofisticación y el manejo aplomado asociados a un buen sedán, junto con la visibilidad y la facilidad de acceso que muchos buscan en un SUV.
Y lo logra con un diseño audaz, protagonizado por el distintivo frontal «Hammerhead» de Toyota y unas líneas de carácter fluidas que recorren su carrocería, montada sobre ruedas de 19 o hasta 21 pulgadas que refuerzan esa postura elevada.

Es un híbrido: Eficiencia o potencia
Ahora sí, hablemos de lo que impulsa a esta propuesta tan particular. Fiel a la estrategia de electrificación de Toyota, el Crown se ofrece exclusivamente con motorizaciones híbridas, pero aquí también encontramos opciones para diferentes gustos. Están disponibles dos sistemas distintos: el Toyota Hybrid System (THS) y el más potente Hybrid Max.
Para las versiones XLE, Limited y Nightshade, se reserva el conocido y muy eficiente Toyota Hybrid System (THS). Este sistema combina un motor de gasolina de 2.5 litros con motores eléctricos en ambos ejes (otorgándole tracción integral electrónica bajo demanda), priorizando el bajo consumo. Hablamos de una eficiencia estimada combinada de unas 41 millas por galón (aproximadamente 17 km/l), lo cual es francamente bueno para un auto de su tamaño y características. Este sistema utiliza una batería de níquel-metal hidruro y está pensado para ofrecer una aceleración suave y una conducción placentera y económica.
Por otro lado, si lo que se busca es una experiencia más vigorosa, la versión Platinum viene equipada de serie con el sistema Hybrid Max. Este es el híbrido de alto rendimiento de Toyota. Aquí, un motor turboalimentado de 2.4 litros se asocia con motores eléctricos más potentes (también con tracción total, pero en este caso electrónica y permanente) y una transmisión automática de seis velocidades con cambio directo.
Aquí el resultado es una potencia combinada de 340 hp y un impresionante par motor de 400 libras-pie, disponible desde bajas revoluciones. Esto se traduce en una respuesta mucho más deportiva y enérgica, aunque, como es lógico, el consumo es un poco mayor, con una estimación combinada de 30 MPG (unos 12 km/l).

Toyota Crown: Una conducción confiable y refinada
Uno podría pensar que esa mayor altura comprometería el manejo, pero los ingenieros de Toyota parecen haber trabajado duro para evitarlo. La estructura del Crown utiliza una combinación de materiales ligeros y de alta resistencia, junto con técnicas de soldadura avanzadas y adhesivos estructurales para asegurar la rigidez del chasis. La dirección se siente directa gracias a que la caja de dirección está montada directamente sobre el miembro de la suspensión.
La suspensión en sí es de tipo MacPherson adelante y multibrazo atrás, una configuración probada. Los modelos XLE, Limited y Nightshade utilizan amortiguadores con válvula de oscilación diseñados para un viaje suave. Mientras tanto, la versión Platinum da un paso más allá con una Suspensión Variable Adaptativa (AVS).
Este sistema ajusta continuamente la fuerza de amortiguación en función de las condiciones del camino y el modo de conducción seleccionado (Normal, Eco, Sport, Rear Comfort o Custom), buscando equilibrar la comodidad con la agilidad, especialmente importante para gestionar la potencia del Hybrid MAX.
Igualmente, se han implementado medidas para reducir vibraciones y ruidos, como bujes suaves y amortiguadores dinámicos, buscando esa sensación de cabina tranquila y refinada. Para complementar, el sistema de frenado controlado electrónicamente incluye Asistencia Activa en Curvas (ACA), que ayuda a mitigar el subviraje en ciertas situaciones.

Interior con lujo y tecnología
Al abrir la puerta, el Crown recibe a sus ocupantes con una cabina que aspira a ser premium. Los asientos tapizados en cuero son estándar en todas las versiones, al igual que el volante calefactable. Los asientos delanteros ofrecen ajuste eléctrico de ocho posiciones, calefacción y ventilación (con tres niveles), mientras que los traseros también son calefactables. El espacio es generoso y los materiales se perciben de buena calidad.
El tablero está dominado por dos pantallas grandes: un cuadro de instrumentos digital de 12.3 pulgadas totalmente configurable y una pantalla táctil central, también de 12.3 pulgadas, para el sistema Toyota Audio Multimedia.
Este sistema es compatible con Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos, y permite interactuar mediante comandos de voz naturales diciendo «Hey Toyota». Ofrece conectividad avanzada, actualizaciones Over-the-Air (OTA) y servicios conectados como navegación inteligente, asistente personal, Wi-Fi a bordo y más (algunos requieren suscripción tras el periodo de prueba).
Detalles como el cargador inalámbrico vertical para el móvil, múltiples puertos USB-C distribuidos por la cabina, el climatizador bizona con controles elegantes y el techo panorámico fijo (estándar en Limited, Nightshade y Platinum) contribuyen a esa atmósfera de confort tecnológico.
El sistema de audio JBL de 11 altavoces (estándar excepto en XLE) promete una experiencia sonora de alta fidelidad. Y para el tope de gama Platinum, se reservan exclusividades como el Head-Up Display a color, el volante con ajuste eléctrico de inclinación y profundidad, y un práctico maletero con apertura manos libres.

Toyota Crown: Seguridad como estándar indiscutible
En materia de seguridad, Toyota sigue su filosofía de ofrecer un equipamiento muy completo desde la versión base. Por lo tanto, todos los Crown vienen de serie con el paquete Toyota Safety Sense 3.0. Este arsenal de asistencias incluye el Sistema de Pre-Colisión con Detección de Peatones (y ciclistas/motociclistas), Control de Crucero Adaptativo por Radar de Rango Completo, Alerta de Salida de Carril con Asistencia de Dirección, Asistente de Mantenimiento de Carril, Reconocimiento de Señales de Tráfico, Luces Altas Automáticas y el Asistente de Conducción Proactiva (PDA), que puede aplicar suaves frenadas o ajustes de dirección para mantener distancias o anticiparse a curvas.
Junto a esto, encontramos de serie el Monitor de Punto Ciego, la Alerta de Tráfico Cruzado Trasero y la Alerta de Salida Segura, que advierte si se va a abrir una puerta cuando se acerca un vehículo o ciclista. Las versiones superiores pueden añadir aún más tecnología, como el Monitor de Visión Panorámica (360°), el sistema de estacionamiento avanzado Advanced Park (en Platinum), Asistente para Atascos de Tráfico, Alerta de Tráfico Cruzado Frontal y Asistente de Cambio de Carril. Y no falta el útil Recordatorio de Asiento Trasero.

Una propuesta audaz y bien equipada
Este Toyota Crown se planta en el mercado como una alternativa interesante para quien busca algo más que un sedán tradicional, pero quizás no necesita o no desea un SUV completo.
Todo su diseño elevado y distintivo es su carta de presentación, pero bajo esa piel encontramos una base tecnológica sólida, dos opciones híbridas bien diferenciadas (una eficiente, otra potente), un interior confortable y lujoso, y un nivel de seguridad muy elevado desde el modelo de entrada.