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Lección de historia para Endrick
Endrick es uno de los niños prodigio del fútbol mundial. Con apenas 18 años sabe lo que es levantar títulos con Palmeiras y también con el Real Madrid. Su irrupción es indiscutible, pero ha decidido intentar hacerse hueco en la delantera más difícil de Europa en la actualidad: la del Real Madrid.
Ancelotti marca el camino al brasileño citando a Vinicius, Rodrygo, Valverde o Camavinga. Repasamos cómo fue su proceso hasta asentarse en el once blanco.
Endrick será titular contra la Real Sociedad otra vez y es uno de los niños prodigio del fútbol mundial. Con apenas 18 años sabe lo que es levantar títulos con Palmeiras y también con el Real Madrid. Su irrupción es indiscutible, pero ha decidido intentar hacerse hueco en la delantera más difícil de Europa en la actualidad: la del Real Madrid.
Si ya es difícil asentarse como titular en el club del Bernabéu, aunque seas apenas mayor de edad y sumes hasta 14 internacionalidades con Brasil, lo es aún más en una plantilla que cuenta con Rodrygo, Vinicius, Kylian Mbappé como titularísimos arriba junto a Jude Bellingham como todocampista. También Brahim Díaz parte por delante y, ahí, aparece Endrick para ‘rascar’ minutos y poder aprovecharlos. Algo que ha conseguido, pero busca más.
En la previa del encuentro de semifinales ante la Real Sociedad, Carlo Ancelotti fue preguntado por la situación de Endrick, que podría ser titular en la competición donde está recibiendo más oportunidades y acumula más goles. El italiano, que sabe tanto por veterano como por diablo (apodo por el que se conoce al Milan, club en el que es leyenda) blue, parisino, juventino o blanco aprovechó la ocasión para ofrecer una clase abierta de gestión de vestuario y jóvenes promesas. ¿Cómo? A través de una lección de historia.
“A Endrick lo tengo en cuenta. Depende de muchas cosas. Más allá de la competencia, no le falta nada. Es un problema de competencia con jugadores que son de una calidad extrema”, le transmitió a la prensa presente y a Endrick. Luego, llegó la clase de Historia Contemporánea. “Creo que la historia de este club dice que muchos titulares han chupado banquillo mucho tiempo. Vinicius un par de años, Rodrygo, Valverde, Camavinga… Si quieres estar en el Real Madrid, es costumbre chupar un poco de banquillo”, le explicó el italiano al delantero, aunque no estuviera presente.
El mensaje fue claro. Con Carlo, el trabajo paga, pero pide paciencia desde el banquillo y buena disposición para aportar cuando toque. Su momento llegará si todo sigue igual. ¿Pero cómo fueron los caminos de estas estrellas que le pide Ancelotti que aprenda? Repasamos la lección de Carlo.
Del Castilla a nueva estrella
Vinicius Jr. es el caso más rutilante de pasar del “chupar banquillo” a ser uno de los puntales del equipo. El brasileño llegó por un precio alto desde Flamengo y estuvo en el foco desde el inicio. Tuvo un breve paso por el Castilla y su proceso en el primer equipo fue lento. Solari le dio toda la confianza, pero una lesión en el tobillo frenó su progresión. Con Zidane le costó más encontrar su hueco, pero acabó imponiéndose en la 20-21 con 31 titularidades y 2722 minutos, pero apenas seis goles y cuatro asistencias.

Criticado por su falta de acierto frente a la meta rival, el brasileño se esforzó en trabajar su definición y dejó de “chupar banquillo” para convertirse en una estrella. Desde la 21/22 solo las lesiones le han impedido llegar a más de 4000 minutos jugados por temporada (23/24). En ninguna, eso sí, ha vuelto a bajar de 20 goles. Esto le ha valido entrar en el podio del Balón de Oro.
Rodrygo, un esforzado titular
Si de Rodrygo siempre se destaca su calidad, no es para menos su esfuerzo. Así se lo han valorado en público tanto sus compañeros como Ancelotti tras el encuentro en el Etihad esta temporada. Salido de Santos como una de las jóvenes promesas, Rodrygo también tocó el Castilla como Vinicius (tres partidos, dos goles). En su trayectoria, solo las lesiones del 7 le han permitido jugar en la izquierda y ha tenido que aprender a encontrar un nuevo hábitat en la derecha.

Goes es también de los mayores ejemplos de la lección que ha querido transmitir Ancelotti. El brasileño entendió su papel y ha entrado en la historia con goles determinantes en Champions League saliendo desde el banquillo. Así, hasta ser titular. Desde la 22/23, Rodrygo suma más de 40 titularidades por temporada aportando más de 20 goles cada campaña (29, 25 y 22 este año). Llegue quien llegue, acaba siendo capital.
Valverde y una apuesta con ‘Carletto’
Fede Valverde ha tenido el camino aún más complicado que los dos anteriores. El uruguayo también fue al Castilla tras destacar en Peñarol pero este, además, llegó a salir cedido al Deportivo de La Coruña. El Pajarito evolucionó al Halcón gracias a su entrega, su calidad y una polivalencia que aún le sigue dando alegrías a su entrenador. El uruguayo tuvo su confirmación en la 22-23 como un ‘falso extremo’ por derecha (56-50 titular) con 12 goles y siete asistencias. Ancelotti le dio la oportunidad y le espoleó. “Si no marca diez goles, rompo el carnet de entrenador y me retiro”. El Halcón cumplió con creces y ahora, incluso cambiando su sitio, nadie le mueve del once.

En la actualidad juega mucho más en el medio, pero su actuación en el derbi contra el Atlético al más alto nivel como lateral derecho cuando fue un parche de emergencia hace que siga creciendo sin parar. Las dudas ya son pasado.
Camavinga apura el proceso
Eduardo Camavinga es el último caso citado por Ancelotti. El francés se encuentra en las últimas etapas de este “chupe de banquillo”. El medio va creciendo en minutos, pero aún no se impone con rotundidad. Todo parece apuntar a que sigue dentro del proceso. En su cuarto año, se espera que encuentre un nivel en este tramo decisivo que le lleve a la confirmación total en su posición.
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