Mundo
VIDEO: Los últimos momentos de un mercenario británico antes de ser capturado por las fuerzas rusas
Actualidad
Antes de su captura, conversa con otros dos mercenarios extranjeros acerca de los ataques de artillería, el precio de los Starlink y la posibilidad de compartir en redes sociales su experiencia en el conflicto ucraniano.
Nuevas imágenes de la cámara corporal de un mercenario británico capturado por las fuerzas rusas en la provincia de Kursk muestran a este junto con otros dos soldados extranjeros sentados en una trinchera en Rusia, charlando tranquilamente durante un ataque de artillería.
El mercenario James Anderson y sus dos compañeros bromean sobre el ataque y dicen que no piensan sacar la cabeza de la trinchera, pero sí una cámara con un palo para grabar lo que ocurre a su alrededor. «No creo que tenga la cabeza levantada, amigo, cuando eso ocurra. –Saca la cámara. ¿Tienes un palo GoPro? –Sí, tengo uno. –¿Lo llevas contigo? –No, no, no. ¿Qué carajo? Camina así. ‘Hola, chicos. Soy yo en Rusia'», bromean los soldados extranjeros de las fuerzas ucranianas
Al mismo tiempo, afirman que la mañana de ese día se oyó como se disparaban muchos sistemas de lanzamiento múltiple Grad. Después, la conversación gira en torno a los satélites Starlink y los equipos para usarlos, lo que revela que ninguno de los extranjeros sabe quién paga sus suscripciones a Starlink, y que los propios dispositivos se los prestan militares ucranianos, además de mencionar a cierto soldado con el indicativo Levsha que aún conserva su Starlink.
Captura
Otro video grabado por la cámara GoPro de uno de los mercenarios revela los tensos momentos previos a su captura. El video muestra un enfrentamiento con soldados rusos en una zona boscosa, donde un combatiente ucraniano confiesa que no sabe adónde ir. En respuesta, el mercenario dice: «Voy a dispararles, joder». Apenas unos segundos después, efectivos del 5.º batallón de la 810.ª brigada de infantería marina rusa lo someten y le ordenan que se tumbe en el suelo.
En el video se puede escuchar que el mercenario les dice a los soldados rusos que es «estadounidense» y que no les entiende, pero RT pudo saber que posteriormente fue identificado como James Anderson, un ciudadano británico que a principios de marzo había sido sentenciado a 19 años de prisión en régimen de máxima seguridad tras ser declarado culpable de terrorismo y mercenarismo.
