La reducción de la tasa de alcohol a 0,2 gramos, un poco más cerca

También se quiere prohibir la difusión, por cualquier medio, de datos como la ubicación de los controles de alcohol y drogas o de cualquiera que se establezca por razones de Seguridad Vial. Leer 

El Pleno del Congreso debatirá hoy si España se convierte en uno de los países más restrictivos con el alcohol al volante, sumándose al cuarteto formado por Estonia, Noruega, Polonia y Suecia que establecen su tasa general en 0,2 gramos por litro en sangre o bien permanece en el «pelotón» europeo del 0,5. Este limite se ha mantenido sin cambios desde el año 1989.

El nuevo límite -como han señalado Pere Navarro, director de la DGT, o Jesús Monclús, de Fundacion Mapfre- equivaldrá a no beber prácticamente nada, ya que un hombre adulto (que admite una mayor cantidad de alcohol) estará dando positivo prácticamente con un tercio de cerveza.

La iniciativa, que fue puesta en marcha el año pasado por el Ministerio del Interior y el 10 de octubre fue apoyada por la mayoría de los grupos de la Cámara Baja. También las asociaciones de víctimas, las de defensa de los automovilistas y los clubes se han mostrado partidarios de introducirla. Pero se descartó la tasa 0 porque hay procesos digestivos que pueden producir alcohol.

En la actualidad y según recoge EFE, 20 países, incluida España, fijan la tasa general en 0,5 gramos de alcohol por litro, mientras que Liechtenstein y Reino Unido poseen el nivel más alto (0,8); Eslovaquia, Hungría, Rumanía y Chequia han optado por la tolerancia cero (0,0) y Lituania es la única que fija el nivel en el 0,4.

Pese a que los conductores disocian consumo de alcohol y volante, un 33 % de los automovilistas y el 29 % de los peatones fallecidos en 2023 presentaban una tasa de alcoholemia positiva. Según otro informe de la Fiscalía General del Estado, en el año 2023 se registraron 50.071 condenas penales por conducir con altas tasas de alcohol. Por otra parte, en las pruebas de alcoholemia realizadas a conductores implicados en siniestros de tráfico en el primer semestre del 2024, el 5,61% dieron resultados positivos. Es, de hecho, la tercera causa de accidentes mortales detrás de las distracciones y los excesos de velocidad.

Actualmente, la sanción arranca en los 500 euros (y cuatro puntos) en los excesos leves; sube a 1.000 euros y seis puntos en los grandes (lo mismo que se castiga la presencia de drogas o a los reincidentes); y se transforma en delito, incluso con penas de prisión o sanción económica y perdida del permiso de conducir entre uno y cuatro años si se trata de un gran exceso. Esto último también se aplica a quienes rechacen someterse a las pruebas.

El Pleno del Congreso debatirá también la prohibición de avisar por cualquier medio, público o privado, de todo dato o información relativa a la ubicación de controles policiales de alcohol y drogas, así como de cualquier otro establecido por razones de seguridad vial.