Economia
Ejecutivo de la ABA habla sobre tasa del dólar en República Dominicana

El director técnico de la Asociación de Bancos Múltiples de la República Dominicana (ABA), Manuel González, aseguró ayer que no debe haber preocupación en la sociedad por el comportamiento de la tasa del dólar, la cual se mantiene elevada hasta alcanzar 63.14 pesos por cada dólar al cierre de la jornada.
Aseguró que el país recibe suficientes divisas para cubrir la tendencia actual del alza del dólar.
Afirmó que la tasa cambiaria se mantiene dentro de las expectativas previstas por el gobierno, incluso para la formulación del presupuesto, así como por el Banco Central.
«Si nos fijamos en el volumen de divisas que genera el país, que este año alcanzará los 45,000 millones de dólares, desde el punto de vista estructural no debería haber ningún problema», explicó.
Sin embargo, advirtió que pueden presentarse variaciones en su comportamiento y flujo debido a un exceso puntual de demanda, lo que genera presiones en el mercado. «A veces, las personas interpretan estas situaciones de forma inadecuada, lo que puede provocar movimientos adicionales en la demanda«, agregó.
Limitaciones explicables
Describió la limitación de la venta al público y la variación de la tasa como un efecto regular que ocurre normalmente a finales de año y durante los dos primeros meses.
El economista precisó que no hay tendencia de altos depósitos en dólares ni riesgos cambiarios, por lo que insistió en que hasta el momento no sería necesaria la intervención del Banco Central con la inyección de divisas.
El ejecutivo respondió algunas preguntas a la prensa durante su participación en la undécima edición de la Semana Económica y Financiera del Banco Central, que cuenta con la participación de 51 entidades del país.
Sobre la posibilidad de que el Banco Central intervenga en el mercado cambiario, González señaló que esta es una práctica habitual para evitar nerviosismo: «En estos problemas coyunturales, el Banco Central interviene para evitar que se genere nerviosismo, lo cual es normal. En todos los países hay administración de la política cambiaria.
Además de las intervenciones, existe flexibilidad. La Ley Monetaria establece la flexibilidad de la tasa de cambio, pero en momentos puntuales, cuando hay una sobredemanda que no está relacionada con factores estructurales, el Banco Central interviene simplemente para tranquilizar el mercado«.
En cuanto al comportamiento del ahorro en divisas, descartó que se esté registrando una tendencia hacia la dolarización.
«No necesariamente. Lo que sucede es que la gente siempre destina una parte de sus activos a proteger su poder adquisitivo. Una parte la ahorra en pesos y otra, más pequeña, en dólares. Sin embargo, esto es una práctica normal en cualquier economía«.
Agregó que «ha habido un ligero incremento, pero no podemos hablar de un proceso de dolarización. Es un crecimiento natural dentro de la gestión de portafolios, donde algunas personas buscan diversificar sus ahorros para mitigar riesgos».
Altas tasas responden a temas de liquidez
González también se refirió a las tasas de interés, señalando que, aunque el Banco Central ha reducido la tasa de política monetaria, su impacto en las tasas bancarias no es inmediato: «Las tasas de interés han permanecido un poco elevadas.
Es cierto que el Banco Central ha bajado la tasa de política monetaria, pero el mantenimiento de tasas altas responde a un manejo coyuntural de la liquidez. Sin embargo, en el mediano plazo, deberían tender a la baja».
Explicó que la reducción de tasas no se produce de inmediato debido al funcionamiento de los bancos: «Hay que entender que los bancos manejan activos y pasivos. Para que se refleje la baja en las tasas, los vencimientos de los créditos y depósitos deben cumplirse.
No es un ajuste inmediato
A medida que se produzcan los vencimientos, las tasas irán reduciéndose de forma gradual, enfatizó. Estimó que el rezago actual en la banca es de «aproximadamente entre tres y cinco meses, dependiendo de cómo estén estructurados los activos y pasivos de cada entidad».
Finalmente, al referirse a los factores que inciden en la evolución de las tasas de interés, González destacó la importancia de la liquidez en el sistema financiero: «Para que las tasas bajen, debe mantenerse una amplia liquidez en el sistema.
Actualmente, parte de los recursos de los bancos está invertida en títulos y valores del Banco Central y del Ministerio de Hacienda. Para que las tasas bajen, debe haber un espacio que permita liberar recursos y destinarlos al crédito».
El director técnico de la Asociación de Bancos Múltiples de la República Dominicana (ABA), Manuel González, aseguró ayer que no debe haber preocupación en la sociedad por el comportamiento de la tasa del dólar, la cual se mantiene elevada hasta alcanzar 63.14 pesos por cada dólar al cierre de la jornada.Aseguró que el país recibe suficientes divisas para cubrir la tendencia actual del alza del dólar.Afirmó que la tasa cambiaria se mantiene dentro de las expectativas previstas por el gobierno, incluso para la formulación del presupuesto, así como por el Banco Central. «Si nos fijamos en el volumen de divisas que genera el país, que este año alcanzará los 45,000 millones de dólares, desde el punto de vista estructural no debería haber ningún problema», explicó.Sin embargo, advirtió que pueden presentarse variaciones en su comportamiento y flujo debido a un exceso puntual de demanda, lo que genera presiones en el mercado. «A veces, las personas interpretan estas situaciones de forma inadecuada, lo que puede provocar movimientos adicionales en la demanda», agregó.Limitaciones explicablesDescribió la limitación de la venta al público y la variación de la tasa como un efecto regular que ocurre normalmente a finales de año y durante los dos primeros meses.El economista precisó que no hay tendencia de altos depósitos en dólares ni riesgos cambiarios, por lo que insistió en que hasta el momento no sería necesaria la intervención del Banco Central con la inyección de divisas.El ejecutivo respondió algunas preguntas a la prensa durante su participación en la undécima edición de la Semana Económica y Financiera del Banco Central, que cuenta con la participación de 51 entidades del país.Sobre la posibilidad de que el Banco Central intervenga en el mercado cambiario, González señaló que esta es una práctica habitual para evitar nerviosismo: «En estos problemas coyunturales, el Banco Central interviene para evitar que se genere nerviosismo, lo cual es normal. En todos los países hay administración de la política cambiaria. Además de las intervenciones, existe flexibilidad. La Ley Monetaria establece la flexibilidad de la tasa de cambio, pero en momentos puntuales, cuando hay una sobredemanda que no está relacionada con factores estructurales, el Banco Central interviene simplemente para tranquilizar el mercado».En cuanto al comportamiento del ahorro en divisas, descartó que se esté registrando una tendencia hacia la dolarización. «No necesariamente. Lo que sucede es que la gente siempre destina una parte de sus activos a proteger su poder adquisitivo. Una parte la ahorra en pesos y otra, más pequeña, en dólares. Sin embargo, esto es una práctica normal en cualquier economía». Agregó que «ha habido un ligero incremento, pero no podemos hablar de un proceso de dolarización. Es un crecimiento natural dentro de la gestión de portafolios, donde algunas personas buscan diversificar sus ahorros para mitigar riesgos».Altas tasas responden a temas de liquidezGonzález también se refirió a las tasas de interés, señalando que, aunque el Banco Central ha reducido la tasa de política monetaria, su impacto en las tasas bancarias no es inmediato: «Las tasas de interés han permanecido un poco elevadas. Es cierto que el Banco Central ha bajado la tasa de política monetaria, pero el mantenimiento de tasas altas responde a un manejo coyuntural de la liquidez. Sin embargo, en el mediano plazo, deberían tender a la baja».Explicó que la reducción de tasas no se produce de inmediato debido al funcionamiento de los bancos: «Hay que entender que los bancos manejan activos y pasivos. Para que se refleje la baja en las tasas, los vencimientos de los créditos y depósitos deben cumplirse. No es un ajuste inmediatoA medida que se produzcan los vencimientos, las tasas irán reduciéndose de forma gradual, enfatizó. Estimó que el rezago actual en la banca es de «aproximadamente entre tres y cinco meses, dependiendo de cómo estén estructurados los activos y pasivos de cada entidad».Finalmente, al referirse a los factores que inciden en la evolución de las tasas de interés, González destacó la importancia de la liquidez en el sistema financiero: «Para que las tasas bajen, debe mantenerse una amplia liquidez en el sistema. Actualmente, parte de los recursos de los bancos está invertida en títulos y valores del Banco Central y del Ministerio de Hacienda. Para que las tasas bajen, debe haber un espacio que permita liberar recursos y destinarlos al crédito». RELACIONADAS Negocios La ABA se destaca a nivel regional, con tres ejecutivos en comités de Felaban Economía, Macroeconomía, María del Carmen Guillén, Santo Domingo, tasa del dólar, Manuel González