Espectáculo
Sócrates McKinney y Laura Tosato: colección de joyas que conecta

Cuando hablamos de Sócrates McKinney, se abre un amplio espectro en la moda, ya que ha alcanzado grandes logros. En esta ocasión, celebra la creatividad a través de la joyería artesanal, ofreciéndonos productos genuinos, accesibles, sostenibles y vibrantes.
Escuchamos directamente de su voz las anécdotas que dieron vida a este proyecto, nacido de los trazos de ilustraciones en una libreta donde, durante más de cinco años, se gestaron las ideas que hoy vemos materializadas.
Este trabajo en equipo pone de manifiesto la experiencia y el conocimiento de la prestigiosa joyera dominicana Laura Tosato, quien tiene una carrera internacional destacada.
Una colección sostenible
La colección, llamada MER, presenta pirámides tridimensionales hechas con piedras representativas de nuestra tierra, como el ámbar y el larimar, además del cuerno.
Dirigida al hombre y la mujer, está compuesta por colgantes, anillos, aretes, pulseras, todos elaborados por manos dominicanas en dos versiones, oro y plata.
Al combinar dos de los tesoros más preciados de la isla, el ámbar y el larimar, con la simbología de la pirámide, cada joya se convierte en un canal para la armonía del cuerpo y el alma.
Cada pieza no solo es un adorno, sino un puente entre lo terrenal y lo espiritual, diseñada para centrar el espíritu y conectar a quien la lleve con las fuerzas del universo.
Todas las piezas están montadas sobre bases metálicas fabricadas éticamente, utilizando aleaciones de metales reciclados, lo que promueve la sostenibilidad y contribuye a la economía circular.
Su diseño estético resalta lo simple, puro y elegante, reflejando un equilibrio en el que se distribuyen los ángulos, colores y proporciones, resultando en piezas contemporáneas y versátiles.
Este equipo de artistas compartió un propósito común, trabajando en armonía para que cada joya fuera más que un simple adorno, sino un receptor de energía que conecta y acompaña a quien la lleva.
La presentación fue creativa y misteriosa, rodeada de terciopelo negro, espejos, ramas verdes y luces dirigidas, creando una experiencia sensorial única.
Fotos: Samil Mateo Domici