Tecnología
El arte del trabajo profundo: las estrategias de Cal Newport para lograr lo imposible en menos tiempo
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Las notificaciones interrumpen. Las reuniones proliferan. Las bandejas de entrada devoran tiempo. En este ecosistema digital, la concentración sostenida se ha vuelto escasa y valiosa.
Cal Newport lo llamó «trabajo profundo» en su libro ‘Céntrate’ (Deep Work): ese estado de concentración sin distracciones que permite resolver problemas complejos. Hay algo paradójico aquí: la economía del conocimiento exige más pensamiento profundo, pero nuestras herramientas digitales trabajan activamente contra él.
Mira las métricas de uso de tu teléfono. ¿Cuántas notificaciones te llegan al día? Seguramente más de 100, posiblemente más de 200. Cada una es una microinterrupción. Recuperar la concentración después no es inmediato.
A menudo entramos en ese estado que podríamos definir como «estar ocupados pero sin avanzar». Confundimos actividad con productividad.
Antes del smartphone, la concentración prolongada era casi una habilidad básica. Hoy es un acto de resistencia, es casi una heroicidad.
Los grandes innovadores aplican a su manera rituales de pensamiento profundo. Steve Jobs presumía de sus caminatas contemplativas. Bill Gates, de sus «semanas de lectura» un par de veces al año. Algo hay.
¿Qué sugiere Cal Newport para incorporar tiempo de este tipo a nuestra vida?
- Programar el trabajo profundo. Bloquear tiempo específico para tareas que requieren concentración total.
- Minimizar el cambio de contexto. Cada salto entre tareas consume recursos mentales. Agrupar tareas similares reduce este «impuesto cognitivo».
- Crear rituales. La voluntad es limitada. Los rituales automatizan decisiones sobre cuándo y cómo trabajar.
- Abrazar el aburrimiento. Nuestra aversión a estar desconectados erosiona nuestra capacidad de atención. El aburrimiento tiene sus ventajas.
- Auditar herramientas. No toda tecnología merece lugar en nuestra vida profesional.
Basecamp o Shopify ya han implementado medidas como los días sin reuniones, o una firme apuesta por la comunicación asíncrona.
El trabajo profundo ofrece algo que las bandejas vacías y las tareas completadas no pueden: significado. El psicólogo Csikszentmihalyi lo llamó «flujo«: ese estado donde el tiempo desaparece y el trabajo se convierte en su propia recompensa.
La necesidad de pensar profundamente ya no es una estrategia que copiar a Newport, es casi una necesidad intelectual.
En Xataka | Ya nadie pone que sabe leer en el currículum. Mantener estos tres datos tampoco tiene sentido en 2025
Imagen destacada | Saurav Thapa Shrestha en Unsplash
–
La noticia
El arte del trabajo profundo: las estrategias de Cal Newport para lograr lo imposible en menos tiempo
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Javier Lacort
.
Las notificaciones interrumpen. Las reuniones proliferan. Las bandejas de entrada devoran tiempo. En este ecosistema digital, la concentración sostenida se ha vuelto escasa y valiosa.
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